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Sostiene Llanera

La secesión no es un arrebato pasajero ni un obnubilado delirio: es una meta fija, una voluntad persistente, un designio

El juez Pablo Llanera, a su llegada al Tribunal Supremo ÓSCAR DEL POZO
Ignacio Camacho

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El magistrado Pablo Llarena debe de ser uno de los pocos españoles, incluyendo también a los independentistas catalanes, que han leído completos los documentos del procés. Esa lectura le proporciona una perspectiva privilegiada y global del plan golpista que tal vez no posea siquiera la ... mayoría de sus propios promotores y desde luego casi nadie en el Gobierno, cuyo pensamiento ilusorio sobre las intenciones de los secesionistas sólo puede explicarse desde la hipótesis del desconocimiento. El relato sumarial se basa en un cotejo de la secuencia de episodios de la revuelta con la hoja de ruta escrita en los papeles que, desde la época de Artur Mas , plasmaban el proyecto. Algunos, como la agenda del número dos de Junqueras —verdadero guión del motín de octubre—, eran secretos, pero otros están publicados por las instituciones autonómicas desde hace un trienio. Desde las leyes de desconexión hasta la declaración de independencia pasando por el referéndum, el programa de ruptura estaba anunciado al alcance de quien quisiera conocerlo. Con pequeñas variaciones de tiempo, todo lo que el separatismo ha hecho estaba previsto y todo lo que había previsto hacer lo ha hecho.

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