Disparan contra la caravana de Lula sin causar heridos en el sur de Brasil

Lula se refirió en las redes sociales a una «persecución de grupos fascistas» . «Ya arrojaron huevos, piedras, dieron hasta un tiro en el ómnibus», escribió Lula en su cuenta en Twitter.

«Nunca había visto un salvajismo como el que estamos viendo ahora de un grupo de personas que yo no sé quiénes son, que nos esperan con palos, piedras y bombas para tratar de evitar que nuestra caravana llegue al lugar que está marcado», expresó el líder del Partido de los Trabajadores (PT). Lula da Silva denunció también que Paraná fue el único estado brasileño que no le ofreció escolta policial.

La presidenta del PT, Gleisi Hoffmann , senadora por el estado de Paraná, informó de que fueron «víctimas de una emboscada» , porque los vehículos recibieron los disparos cuando se vieron obligados a parar, ya que tenían las ruedas perforadas por unos clavos que había en la carretera.

El pasado domingo, la comitiva del PT fue recibida con huevos y piedras por parte de unos manifestantes en São Miguel do Oeste , en el estado de Santa Catarina , lo que motivó que Lula pidiera más seguridad. El área de Quedas de Iguazú está rodeada de campamentos del Movimiento de Trabajadores Sin Techo (MTST), fieles a Lula, por lo que las primeras sospechas de los «petistas» apuntaron a hombres armados vinculados a terratenientes próximos a la derecha .

El ministro de Seguridad Pública, Raul Jungmann , consideró el ataque como «inaceptable». «Eso no puede repetirse dentro del régimen democrático», señaló el ministro del Gobierno de Michel Temer , quien también condenó los enfrentamientos entre militantes «petistas» y detractores de Lula. Jungman afirmó, sin embargo, que la responsabilidad de la seguridad era del gobernador de Paraná, Beto Richa, opositor del PT , y prometió pedirle refuerzos e investigar si se trataba de un «atentado político» contra el expresidente.

La caravana de Lula partió de Bagé, en Rio Grande do Sul , hace más de una semana en busca de apoyo a su candidatura presidencial por el sur del país, región donde hoy es menos popular que en el resto del territorio y ha sido blanco de protestas en casi todo su periplo. El sur, sin embargo, tiene un peso simbólico para el partido , donde tiene una militancia importante y eligió los primeros alcaldes y gobernadores de su historia.

El ataque a la caravana «petista» ocurre también en un momento de tensión política entre militantes y opositores a Lula, días antes de que la Corte Suprema juzgue su petición de Habeas Corpus preventivo. La decisión de los jueces, prevista para el 4 de abril , puede definir su prisión después de que un tribunal de segunda instancia confirmó su condena el pasado lunes. Según la ley brasileña «Ficha Limpia» Lula ya no podría ser elegido, pero sus abogados aún pueden apelar ante el Tribunal Superior Electoral (TSE) o a la Corte Suprema.

Pese a los procesos judiciales de la Operación Lavacoches abiertos en los tribunales y la condena a 12 años y un mes de prisión por corrupción y blanqueo de fondos, Lula es favorito en los sondeos, con un 36 por ciento de la intención de voto , y ha declarado que no renunciará a volver a lanzar su candidatura a la presidencia.