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Gabriel Cruz murió estrangulado, tiene golpes y la detenida por el crimen no colabora

Ana Julia se puso nerviosa al saber que iba a haber registros y sacó el cuerpo de la acequia en la que lo había ocultado, tapado con tierra y ramas

Ana Julia Quezada en el regsitro en la finca de las Negras Fran Muñoz

La detención de Ana Julia Quezada no fue una sorpresa y menos para los padres de Gabriel Cruz , el niño de ocho años asesinado en Almería. «No se podía decir nada porque era parte de la investigación», reveló ayer Patricia Ramírez en ... una entrevista a la Cope. Para Puri Carmen, la abuela del pequeño, que el 27 de febrero estaba en Las Hortichuelas (Níjar) con su nieto y la pareja de su hijo cuando el niño salió de su casa después de comer, tampoco lo fue. Los investigadores les pidieron que disimularan para evitar que la sospechosa se pusiera en alerta y pudiera complicar aún más las pesquisas. Ellos hicieron de tripas corazón y aguantaron el tipo de forma admirable. «Lo sabíamos todos», admitió la alcaldesa de Níjar, Esperanza Pérez que ha estado muy cerca de la familia.

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