«Libres e Iguales» se presenta en Santander: “Llamamos a la reagrupación democrática”
La capital cántabra es la cuarta en acoger un acto de esta plataforma
El movimiento cívico contra la independencia de Cataluña, «Libres e Iguales», se ha presentado en Santander, después de haber mostrado su manifiesto en Madrid, Málaga, y Cádiz. La capital cántabra se ha convertido en la cuarta ciudad en acoger un acto de la plataforma desde que se leyera el manifiesto en la puerta del Congreso de los Diputados el pasado 15 de julio.
Al acto han acudido por parte de la plataforma la portavoz, Cayetana Álvarez de Toledo, la empresaria Isabel Benjumea, y el escritor Jesús Laínz. Manuel Ángel Castañeda, director del Diario Montañés durante veinte años y actual presidente del Ateneo (sede del acto) ha actuado como maestro de ceremonias. Además, intervino Carmen Carrión, presidenta del Foro para la Regeneración en Libertad (FOREL).
«A ver qué nos cuentan, que esto no puede seguir». Una mujer, sentada en las primeras filas, hacía público su apetito justo antes de comenzar el acto. El primero en tomar la palabra era el presidente de la sede, Castañeda, que proclamaba la similitud entre el Ateneo y « Libres e Iguales »: «Aquí abrimos las puertas para que todo el que tenga algo que decir pueda hacerlo independientemente de su ideología, partido o procedencia». «En este auditorio no hay otras normas que no sean las de la Constitución», algo que recalca la plataforma cívica en todos los actos en los que participa.
Carmen Carrión aprovechaba su turno para desmigar el «peligro nacionalista»: «El problema del independentismo es que es insaciable. Tiene el objetivo de la ruptura y esto no terminará hasta que lo consigan». Además, Carrión, quiso lanzar un aviso al Gobierno: «Hay que echarles un pequeño rapapolvo porque contra el vicio de pedir, está la virtud de no dar».
Libres e Iguales «no es un partido político»
Jesús Laínz (escritor, columnista y firmante del manifiesto) centró su intervención en la «anormalidad de España». «España, a día de hoy, es una nación anormal. España es un Estado de Derecho en el que no se cumple la ley y no se acatan las sentencias, sobre todo cuando andan por medio los nacionalistas vascos o catalanes». Laínz hizo un llamamiento al Estado: «Llevan cuarenta años por encima de la ley y no ha pasado nada». En cuanto a la movilización de los ciudadanos que reclama la plataforma cívica de la que es firmante dijo: «Los ciudadanos españoles deben subirse al cuadrilátero».
La encargada de cerrar el acto era la diputada del PP y portavoz de la plataforma, Cayetana Álvarez de Toledo, que explicaba a los asistentes al Ateneo santanderino que «esto no es un partido político ni nada parecido». Además, contaba el nacimiento de «Libres e Iguales» llamando a la movilización de los ciudadanos: «Hemos aceptado al nacionalismo como único interlocutor y esto hay que cambiarlo». La diputada popular llamó a los asistentes a la «reagrupación democrática» y anunció con vistas al futuro que «esto es solo el principio».
Después de las intervenciones de los asistentes, llegaba uno de los momentos más llamativos del acto. Un hombre de avanzada edad se levantaba de su silla para hacer uso de su turno de pregunta: «Yo he vivido el final de la monarquía de Alfonso XIII, la república, el franquismo, y esta democracia. No puede ser que después de lo que hemos trabajado siga habiendo gente que esté pasando hambre». El sucedáneo de pregunta-conferencia que estaba dando el hombre se vio interrumpida por una ovación cerrada del auditorio, que fue acallada por el moderador del acto pidiendo al hombre del micrófono que centrara su pregunta, a lo que éste respondió: «No tengo ninguna pregunta. Simplemente, me gustaría darles la enhorabuena por lo que están haciendo».
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