La cuarta avería de un avión oficial en 4 meses retrasa el regreso de la Reina

El avión en el que Doña Sofía regresaba a Madrid, tras realizar un viaje de cooperación a Guatemala , tuvo que abortar el despegue tras hacer una escala técnica programada en Santo Domingo (República Dominicana). Doña Sofía volaba en un Airbus de la Fuerza Aérea Española con 31 años de antigüedad que acaba de ser sometido a una exhaustiva revisión programada.

El Airbus partió de Guatemala poco antes de las nueve de la noche (hora española) y, tras realizar un vuelo sin problemas, aterrizó pasada la medianoche en el aeropuerto de Las Américas para repostar combustible. Una vez realizada esta operación, la Reina y la delegación que le acompañaba regresaron a bordo del avión para continuar el viaje.

Cuando el Airbus tomó velocidad en la pista para despegar (una y media de la madrugada), el piloto detectó que se había encendido una luz naranja en el cuadro de mandos y abortó suavemente el despegue disminuyendo la velocidad. En un primer momento, el comandante comunicó a los pasajeros que se había registrado «una falsa indicación en el motor» y que se procedería de nuevo al despegue, pero instantes después volvió a comunicar que había un problema en «la reversa del motor» (sistema que ayuda al avión a aterrizar), por lo que se revisaría el Airbus y se esperaba solucionar el problema en menos de dos horas. Dos horas después, el Airbus estaba reparado y despegó rumbo a Torrejón de Ardoz, donde aterrizó tras un vuelo sin problemas, pero con casi tres horas de retraso, a las doce menos cuarto del mediodía de ayer.

En la base de Torrejón aguardaba la delegación española que, encabezada por el ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo, tenía programado partir a la una de la tarde hacia Filipinas. Inicialmente, estaba previsto que el mismo Airbus que había trasladado a la Reina desde Guatemala llevara al ministro a Filipinas, tras ser sometido a limpieza y repostaje. Sin embargo, tras la avería reparada sobre la marcha, Defensa preparó el segundo Airbus con que cuenta la Fuerza Aérea Española para Margallo.

El avión en el que viajó el ministro es el mismo que ha fallado al Príncipe de Asturias en dos ocasiones. La primera vez fue el pasado 25 de noviembre, cuando Don Felipe tuvo que cancelar el viaje oficial que tenía previsto realizar a Brasil, y la segunda, el 27 de enero, cuando viajaba a Honduras para asistir a la toma de posesión del nuevo presidente. El avión del Heredero de la Corona también se averió tras realizar una escala técnica en Santo Domingo, a donde tuvo que regresar para que fuera reparado. Don Felipe llegó a Tegucigalpa nueve horas después de lo previsto. En esa ocasión, Defensa prefirió enviar a Honduras el otro avión (el que ayer se averió) para recoger a Don Felipe, con el fin de extremar la seguridad.

El Príncipe ha sido el más afectado por las averías, ya que en las dos ocasiones tuvo que cancelar o modificar los encuentros internacionales que tenía programados, pero el presidente del Gobierno -que tiene cierta aprensión a volar tras su accidente de helicóptero- también se ha visto afectado por este tipo de incidentes. En su caso, el avión averiado fue el Falcon en el que tenía previsto regresar de Dublin el pasado 8 de marzo, y el tipo de avería fue similar al que sufrió ayer la Reina. Defensa también envió otro avión a Irlanda para recoger a Rajoy, pero el presidente prefirió volver en el Falcon que ya había sido reparado.

Aunque todos los fallos han sido siempre menores, según Defensa, lo cierto es que los viajes oficiales se realizan ahora bajo la incertidumbre y, cuando menos, con el riesgo de que nuestras autoridades no lleguen puntuales a sus citas.