Oliu, el banquero que dijo no
De perfil público discreto, el presidente de Banco Sabadell ha parado los pies a Artur Mas
àlex gubern
Como un gas que se expande sin una pared que lo contenga, el debate sobre el proceso soberanista lo ocupa todo en Cataluña. En un contexto en el que la política se ha convertido en monotema, muchas miradas se han dirigido sobre los empresarios y, ... de manera particular, sobre los presidentes de las grandes corporaciones y de los dos bancos que en Cataluña han sobrevivido a la gran ola que ha barrido el sector: Isidro Fainé (Caixabank) y Josep Oliu (Banco Sabadell). La posición de ambos ante el proceso ha sido clara, nada fuera de la legalidad, una posición que en las últimas semanas se ha hecho más rotunda, dejando al presidente Artur Mas sin un apoyo que de otra forma sería fundamental.
Entre los empresarios, diretivos y presidentes de entidades que en este contexto de politización se han atrevido a decir que no sobresale Josep Oliu Creus (Sabadell, 1949), al frente de Banco Sabadell, la entidad que preside desde 1999 y que ha sabido aupar como un grande entre los colosos del sector. Licenciado en Económicas y Empresariales por la Universidad de Barcelona, se doctora en Minessota (EE.UU) para luego comenzar una carrera en el campo de la docencia (Universidad de Oviedo) que pronto abandonará. Llamado a asumir importantes responsabilidades, desarrolla un papel clave en el Instituto Nacional de Industria (INI) en los primeros ochenta, cargo que abandonará para recalar en la que desde 1986 sería ya su casa, Banco Sabadell.
Allí estaría tutelado por su padre, Josep Oliu Pich, que entró a trabajar en el banco en 1939, y donde acabaría jubilándose como director general y consejero delegado en 1990 tras impulsar el crecimiento de una entidad que con un origen local se convertiría en un importante actor del panorama financiero español. Es en 1999 cuando Josep Oliu Creus es nombrado presidente de la entidad (reelegido en 2010), un año a partir del cual comienza un proceso de modernización del banco, rodeándose de profesionales de la talla de Juan María Nin, entre otros.
De físico imponente, Oliu cultiva un perfil público discreto, muy habitual entre los altos directivos en Cataluña, una nula propensión al protagonismo que, no obstante, ha aparcado cuando ha tenido que salir al frente y, siempre con buenas palabras, pararle los pies al presidente Artur Mas .
Oliu, el banquero que dijo no
Noticias relacionadas
- Las patronales plantan a Mas y exigen poner fin al proceso separatista
- El triple rechazo empresarial al desafío de Mas
- Banco Sabadell descarta la secesión de Cataluña
- Los empresarios catalanes aparcan su silencio y claman contra el separatismo de Mas
- El Sabadell triplicó sus ganancias en 2013, hasta casi 250 millones de euros
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete