Los médicos implantan al Rey una prótesis de cadera durante dos horas y cuarto

La caída se produjo durante un viaje privado a Botsuana, país que Don Juan Carlos ha visitado en otras ocasiones este país africano para practicar la caza mayor .

Según el doctor Villamor, sufrió «un tropezón casual en un escalón y con ello una torsión de su cadera derecha con la mala consecuencia de sufrir una fractura en la zona más alta del fémur». La lesión fue «desafortunada» y la operación se prolongó más de lo normal, hasta «dos horas, dos horas y cuarto», por la artrosis que sufría, que «era motivo de molestias» y le impedía moverse con naturalidad en su día a día. El equipo médico decidió resolver a la vez la fractura y las lesiones que ya tenía.

En este sentido, se ha llevado a cabo una reconstrucción de los fragmentos de fractura y se ha colocado una prótesis para sustituir esta articulación. Para ello se le han puesto dos «anclas» en la pelvis y en el fémur y se ha sustituido la articulación desgastada en la cadera por una cabeza nueva de cerámica con un vástago en el fémur y un receptáculo en la pelvis. El resultado de la operación ha sido «muy satisfactorio», según Villamor.

El Rey ha permanecido ocho horas en observación y ya se encuentra en planta, moviendo «con naturalidad y amplitud» la cadera. Don Juan Carlos se encuentra «sin dolores» y se prevé que esta tarde realice la primera sesión de fisioterpaia e, incluse, empiece a caminar con la ayuda de muletas. Seguirá hospitalizado «cuatro o cinco días» y en uno o dos meses podrá realizar «todo tipo de actividad física».