La Junta niega que haya facturas ocultas y cifra en 416 millones la deuda a proveedores

Según indicó Araújo, la deuda pública con la que la Junta de Comunidades cerró 2010 ascendía a 5.819 millones de euros, una cifra que equivale al 16,5% del PIB, un endeudamiento que representa el 5% del de todas las Comunidades Autónomas. De forma más concreta, aseguró que la deuda de cada castellano manchego es de 2.700 euros, una cifra que dista poco a la media de las comunidades autónomas, que es de 2.500 euros.

La consejera ha querido salir al paso del «ejercicio de irresponsabilidad» del PP, según dijo, y dio unas cifras muy diferentes a las que se han barajado en los últimos días sobre el dinero que debe la Junta a empresas e instituciones. Así, Araújo precisó que, a fecha de 30 de abril, la Junta de Comunidades adeudaba 416 millones de euros a proveedores y ha dejado claro que todas las facturas están contabilizadas en el sistema. Al cierre del ejercicio de 2010, las obligaciones pendientes de pago ascendían a 201 millones de euros, de los que 176 millones eran facturas a proveedores y 25 millones de euros deudas reconocidas pendientes de pago a corporaciones locales.

Tras hacer un llamamiento a «la calma y a la tranquilidad», la responsable económica del Gobierno saliente de Castilla-La Mancha ha explicado que el déficit público acumulado a 30 de abril por la comunidad es de 639 millones de euros, el 1,7% del PIB, medio punto menos que un año antes.

También se mostró muy crítica por la actitud del PP, ya que según la vicepresidenta, sólo ha conseguido llevar intranquilidad a los mercados financieros. Indicó que tras semanas de trabajo el viernes pasado «conseguimos que una de las dos agencias de Calificación (Fitch) mejorase sus perspectivas sobre Castilla-La Mancha, y ayer la otra agencia que nos califica –Moody’s- nos solicita información alarmada por las noticias que habían aparecido, y es que lo único que ha cambiado entre el viernes y el lunes es la irresponsabilidad del PP de Castilla-La Mancha, difundiendo sin ninguna prueba y sin ningún dato que lo soporte unas noticias y valoraciones acerca de la situación económica que se ha traducido en desconfianza»

.