«En España los políticos se han echado en brazos de internet»

¿Cuándo nació Periodismo al pil pil y por qué?

En octubre de 2006, hace ya cuatro años. Había tenido otros blogs pero no acababa de encontrar mi lugar. No estaba cómodo con el formato. Me costaba escribir después de una jornada de trabajo. Perseveré y me fui abriendo un hueco. Quería hablar de mi profesión, el periodismo, y tratar de aportar algo de valor contando cómo hacía mi trabajo.

¿Qué aporta de nuevo con respecto a otros blogs periodísticos?

Lo que he notado que más le gusta a la gente es cuando explico cómo he trabajado un reportaje. Cuando cuento cómo y por qué lo he enfocado, cómo se realizó, los medios que se utilizaron, los inconvenientes y sus soluciones... Lo que quería hacer y lo que al final salió. No sé, también pongo mi opinión, que no aparece en los reportajes o informaciones. Y luego, finalmente, pongo capturas de todo. La gente lo agradece. A veces pienso que es quizá demasiado ego por mi parte, pero quizá el mejor valor de internet es compartir lo que sabemos. Así que me lo tomo como un ejercicio de transparencia y que, al publicar estas experiencias profesionales, al tener respuestas y críticas, pues seguimos aprendiendo.

¿Cuál es tu opinión sobre el momento actual de los blogs?

Creo que han resurgido. Me explico. Se empezó a decir en 2007 y en 2008 que la blogosfera no existía y que los blogs habían muerto. Creo que hubo muchos malentendidos. Lo que realmente se quería significar es que los blogs, como fenómeno, como moda, como alimento de encuentros de especialistas o como comidilla de expertos, había terminado. Los blogs habían dejado de estar a la última y ya no importaban ni a la opinión pública ni a la opinión publicada. Simplemente, se habían introducido en el ecosistema informativo. Ya formaban parte natural de él. Fue entonces cuando del «boom» de los blogs se pasó al «boom» de las redes sociales. ¿Qué sucede ahora? Que ha llegado la crisis a los medios y se está apostando, sobre todo desde los periódicos, por la convergencia de las redacciones. Y uno de los mejores vehículos para cambiar el chip de los redactores digamos tradicionales es el blog. Por eso, de un tiempo a esta parte, vemos que hay un montón de periodistas consagrados que se han abierto un blog. Y lo mejor de todo es que bloguean de maravilla. Pienso en Fernando Garea, Enric González o en Ramón Lobo, por poner tan sólo tres ejemplos que no sean de mi casa, que es Vocento. Hay otro factor. Y se llama Barack Obama. En España, los políticos se han echado ya de forma definitiva en los brazos de internet. Y hay políticos que están haciendo un uso muy bueno de los blogs para hacer política. El mejor ejemplo creo que es Patxi López. Pero estoy convencido de que a partir de septiembre, cuando comience la carrera para las elecciones municipales, veremos trabajos extraordinarios con blogs y redes sociales. Y todo esto, como periodista. Estoy convencido de que músicos, cocineros, psicólogos o profesores utilizan también el blog como herramienta para su trabajo.

¿Qué papel tienen dentro de los medios tradicionales?

Pues en Ideal , la web de mi periódico, Ideal de Granada, el año pasado suponían el diez por ciento del tráfico total. Y la página web de Ideal es la primera de Andalucía y está entre las primeras de España en la categoría de diarios digitales. Además de, digamos, la cantidad, es muy importante la calidad que aportan. Tienen un valor añadido extraordinario. Pongo un ejemplo de lo más reciente. El Granada C. F. ha subido 22 años después a Segunda División. Como se comprenderá, hemos tirado la casa por la ventana tanto en el papel como en el web. Pues una vez más, la sorpresa ha sido que todos nos hemos puesto a bloguear sobre el ascenso y los usuarios de Ideal lo han agradecido, porque se ha dado cabida a sentimientos que difícilmente caben en un medio local. Permiten una relación personal y directa con nuestros lectores.

¿Han influido las redes sociales en la forma de bloguear? ¿En qué sentido lo han hecho?

Pues, por ejemplo, en mi cumpleaños pedí en un post y a través de Tuenti, Facebook y Twitter que la gente me regalara canciones y me han mandado por estas redes sociales y por los comentarios en el post no sé si sesenta o setenta. Me quedé muy contento. Fue un regalo virtual muy emocionante. Pero mira si han cambiado las cosas que me llegaron media docena de canciones por los comentarios en el post del blog y unos treinta por Twitter y otras tantas por Facebook. Es decir, es cierto que se han llevado la conversación del blog, mayormente, aunque también la han enriquecido. Además, son unas fuentes de tráfico tremendas. En las estadísticas de mi blog aparece como primera fuente de tráfico Google (para variar) luego Twitter, Facebook y Tuenti. Es increíble. Así que, finalmente, la respuesta a la pregunta no sé si es tanto que hayan influido en la forma de bloguear como que han añadido trabajo. Es decir, te curras un post, lo publicas y del tirón lo lanzas por tus redes sociales para ver qué resultado tiene. En mi caso, quedo pendiente de los retuiteos y de los comentarios en Facebook. Y a partir de ahí, trato de responder a todos. También me gusta fijarme en quién me enlaza, para saber quién me sigue y también agradecérselo. No te digo ya si llega a portada de Meneame, como me ocurrió el otro día, o de Bitacoras, donde tengo un canal.

¿Qué opinas de aquellos que aseguran que si no tienes presencia en estas plataformas no tienes futuro en el periodismo?

Buena pregunta pardiez. Lo que ha cambiado en el periodismo ha sido la intermediación. Los medios tradicionales han perdido el monopolio. Ahora la intermediación está dispersa. Se ha democratizado. Todo esto que digo es parte del debate, no son ningún tipo de mandamientos. Entonces, lo que tiene que hacer un periodista es participar en esta nueva intermediación, que se cristaliza en la conversación que usuarios y medios mantienen en la Red. Dicho de otro modo, la noticia, que es el alimento de los medios y la meta de cualquier periodista, se encuentra ahora no sólo en la calle sino también en la Red. Por tanto, hay que tener a gente trabajando en la Red y participando en la conversaciónn. Una parte de tu trabajo tiene que ser rastrearla, estar atento y detectar noticias o tendencias, como explicaba la responsable del New York Times la semana pasada.