La «mano que mece la cuna» en Benidorm

De culminarse, algo que tras la reunión de ayer en Ferraz no está aún claro, la operación convertiría a Iraola -madre de la secretaria de Organización del PSOE Leire Pajín- en «alcaldesa en la sombra» de Benidorm, como «número 2« del socialista Agustín Navarro, mientras que el Urbanismo quedaría en manos del edil tránsfuga, ex del PP, José Bañuls.

Una «institución»

El «pajinato» es toda una «institución» en Benidorm. Durante los últimos cinco años, nada se ha movido en el PSOE de Alicante sin el consentimiento de Maite Iraola y su marido, José María Pajín.Desde la sede socialista de la calle Ferraz, y a través de sus progenitores, Leire Pajín se ha asegurado el control del aparato del partido en Alicante y de la Administración colocando en puestos clave a personas de su entera confianza, como la secretaria provincial del PSOE, Ana Barceló, o la propia subdelegada del Gobierno, Encarna Llinares, para la que José María Pajín trabaja como asesor.

Pero su influencia se extiende también hasta el corazón de la dirección regional del PSPV-PSOE en la Comunidad Valenciana, a través de la secretaria de Organización, Elena Martín, y del vicesecretario Alejandro Soler (hasta hace poco imputado por su gestión al frente del Ayuntamiento de Elche).

Por tanto, el propio líder del PSPV, Jorge Alarte, es «rehén» del clan Pajín, al que se ha atrevido a desafiar ahora negándose a dar luz verde a la moción de censura contra el alcalde de Benidorm Manuel Pérez Fenoll. Una moción que vendría a colmar los anhelos del clan socialista más poderoso de Alicante.

La «conjunción planetaria» que ha alumbrado esta saga política comenzó a principios de los años 70 en la Facultad de Magisterio de San Sebastián, donde estudiaban José María Pajín (natural de León, de donde procede su estrecha amistad con Zapatero) y Maite Iraola (nacida en Hernani). Tras su matrimonio, nacerían sus dos hijas: Amaya y Leire, quien aprendió euskera en una ikastola de San Sebastián. Pero el matrimonio Pajín había descubierto Benidorm durante el viaje de fin de carrera y decidió instalarse en esta población.

En 1983 ambos obtuvieron plaza en el colegio de Primaria Mestre Gaspar López, donde la propia Leire Pajín mostró su temprana vocación política: primero como representante de los alumnos en el Consejo Escolar y luego como activa líder del movimiento juvenil en la Universidad de Alicante, donde estudió Sociología.

Zapatero y Caldera

Paralelamente, sus padres desarrollaban una intensa actividad política, en la que han mostrado un singular concepto hereditario, aupados por la amistad con destacados líderes socialistas como Rodríguez Zapatero o Jesús Caldera, un asiduo visitante de su domicilio en Benidorm.

Muchos socialistas alicantinos sostienen que los Pajín son expertos en intrigas políticas... y en perder elecciones. José María Pajín fue concejal del Ayuntamiento de Benidorm durante casi dos décadas y candidato a la Alcaldía en 1995 y 1999. En ambos casos, se estrelló en las urnas contra la hegemonía de los populares, que llevan 18 gobernando ininterrumpidamente el municipio.

Cuando José María Pajín abandonó el acta de concejal, en 2003, tomó el relevo su mujer. Pero lo hizo como le gusta, en un segundo plano, como «número 2» de la candidatura encabezada por el portavoz socialista Agustín Navarro. Aunque casi nadie duda de que es ella quien dirige la estrategia del partido.

Dimisión

Del mismo modo, cuando en 2000 José María Pajín renunció a seguir dirigiendo el PSOE de Benidorm, asumió este papel su mujer. El partido seguía siendo una cosa de familia. Iraola dimitió como secretaria general siete años después alegando tensiones internas, pero desde entonces ha seguido controlando la agrupación local por persona interpuesta: primero a través de la presidenta de la gestora, Mariona Fluviá, y ahora por medio de de su nuevo secretario general, Iván Martínez.

Los desvelos de Maite Iraola pueden verse ahora premiados. Debido a discrepancias personales con el alcalde, el concejal José Bañuls abandonaba en junio pasado el equipo de gobierno y pasaba al grupo de «no adscritos», abriendo la puerta a una moción de censura.

El secretario general del PSOE en la Comunidad Valenciana, Jorge Alarte, se ha interpuesto en su camino garantizando que su partido no se va a apoyar en un tránsfuga para derribar al gobierno popular de Benidorm.

Para muchos, Alarte ha firmado su finiquito con esas palabras, si no ahora, sí dentro de algún tiempo. Leire Pajín, por lo que pueda venir, declaraba ayer en «La Sexta» sobre la posibilidad de una moción de censura: «Lecciones de ética del PP al PSOE, de gobernabilidad y de mociones de censura en Alicante, y concretamente en Benidorm, ninguna». Pues eso.