El uso doméstico de la impresión 3D reducirá el gasto sanitario
La «gran eclosión» del sector se producirá con el descenso de los precios de estas máquinas
El uso doméstico de la impresión 3D reducirá el gasto sanitario de la Administración y producirá el abaratamiento de los procesos aplicados a la medicina al promover la autofabricación de productos de apoyo y sanitarios, según han asegurado diversos expertos durante el « Taller sobre Impresión 3D» , organizado por el Centro Nacional de Tecnologías de la Accesibilidad (CENTAC).
«El objetivo final es producir nuestros propios objetos. Para ello, la impresión 3D permite la fabricación de objetos caseros personalizados a un coste muy bajo», ha comentado el presidente de la Fundación Tecnología Social, Enrique Varela, quien ha explicado que una de las aplicaciones «más interesantes» de la impresión 3D es la impresión social.
Y es que, prosigue, gracias a este uso se pueden realizar diseños personalizados de objetos para personas mayores o con algún tipo de discapacidad. «Desde prótesis adaptadas para imprimir dedos o piernas, productos de apoyo como pinzas de apertura fácil hasta robótica infantil con juguetes adaptados para niños o mapas en relieve para personas ciegas», ha apostillado.
Dicho esto, el experto ha asegurado que la «gran eclosión» de la impresión 3D se va a producir en el uso doméstico debido a que los precios han bajado «mucho» y ya se puede adquirir una impresora de este tipo por unos 1.600 euros.
«Una de las claves de la impresión 3D son los códigos abiertos, para que cada uno pueda personalizar los diseños. Los ficheros de diseño ya están en la red. En la industria hay una contrarreacción, aunque acabarán vendiendo ficheros. De hecho, ya se está trabajando en repositorios de ficheros testados por profesionales», ha recalcado.
Además, en todas las ciudades ya existen comunidades y talleres de 'makers' --creadores de tecnología-- donde se transmiten conocimientos y se investigan nuevos diseños para aplicar a la impresión 3D.
« La impresión 3D va a cambiar el sistema de trabajo, de creación y producción. Es una tecnología fácil, con gran nivel de adaptabilidad y con miles de usos. Además, no hace falta ser un físico cuántico, solo dedicar tiempo a aprender», ha zanjado el director de Accesibilidad de CENTAC, Juan Carlos Ramiro.
Noticias relacionadas
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete