Olivito llena de sangre la curva de la Estafeta

El resto del recorrido y de los toros prácticamente ha desaparecido de la memoria colectiva después de presenciar las dantescas imágenes que se han visto en la curva de Estafeta. Un toro colorado, Olivito se ha caído en la curva cuando sus hermanos han continuado normalmente. Sin embargo, este astado ha embestido violentamente contra su lado derecho, la parte cerrada de la curva, alcanzando a un mozo con el que se ha cebado obsesivamente embistiéndole en numerosas ocasiones. Le ha sacado de la pared donde intentaba resguardarse, le ha arrastrado hacia atrás hasta llevarle al tramo de Mercaderes, donde ha seguido cebándose en él. Finalmente, agentes de Policía han conseguido arrastrarle hasta el otro lado del vallado, aunque ya era evidente la gravedad de las heridas en el muslo del mozo.

Posteriormente ha continuado su camino, pero se ha fijado en otro mozo al que también ha embestido y se ha cebado con él nuevamente, propinándole otras tres cornadas.

Los dos corredores corneados tienen graves heridas. Uno de los mozos es vecino de la localidad navarra de Burlada. Se trata de EGE, de 21 años y tiene heridas por asta de toro en los dos muslos y en el perineo. Su pronóstico, de momento, es reservado. El otro mozo es un joven australiano, de 26 años, cuyas iniciales se corresponden con JB. Sufre heridas por asta de toro en el hemitórax, en el abdomen y en el muslo. Su estado es grave. Posteriormente, se ha identificado a un tercer herido por asta de toro en el muslo derecho: otro australiano de 24 años con iniciales JM.

Olivito ha continuado su recorrido por la calle Estafeta dándose la vuelta constantemente, incluso intentando hacer el recorrido en sentido contrario, lo que ha provocado numerosos momentos de pánico. Hoy mejor que nunca se ha apreciado la labor de los pastores y de valientes mozos que cada vez que Olivito se daba la vuelta exponían su vida para que el astado recuperara el sentido correcto de la carrera.

Finalmente, con la llegada de los mansos de cola, Olivito se ha vuelto a sentir protegido y ha terminado el encierro con normalidad y en la compañía de estos mansos. Los mansos o cabestros de cola salen dos minutos después que el resto de la manada precisamente para intentar recoger a los posibles toros que se queden rezagados. En el encierro de hoy su labor ha sido más valiosa que nunca y ha mostrado perfectamente cuál es su misión.

En encierro ha durado un total de 4 minutos y 58 segundos, el más largo de todos los Sanfermines. Y ha dejado, además de los cogidos, otros cuatro traslados por contusiones.

Los contusionados son FCP, de 33 años y vecino de la localidad navarra de Milagro. Sufre un traumatismo craneoencefálico. El vecino de Madrid, de origen ecuatoriano, JAM, tiene un traumatismo facial que ha sufrido en el tramo de Telefónica. El también madrileño, RS, de 27 años, sufre una contusión en la clavícula izquierda. Su pronóstico es reservado a la espera de conocer el alcance real de la clavícula. Finalmente, también en el tramo de Telefónica ha sido atendida una mujer, vecina de Logroño. Se trata de MDN, de 26 años y que sufre un traumatismo facial con pronóstico leve.

De esta manera, se cierra el capítulo de los encierros de San Fermín, con una carrera dramática y a la espera de la evolución de todos los heridos que permanecen ingresados, deseando su más pronta recuperación.