«Tormenta de ideas» sobre Sol

En una semana se presenta la maqueta gigante que reproduce la plaza a escala 1:10, y en cuyo interior –visitable– se realizará una gran exposición sobre el lugar, y se recogerán las sugerencias de todos los que quieran aportarlas. En tres meses, un concurso internacional de ideas intentará concretar soluciones.

La plaza más famosa de Madrid —por la que pasan 150.000 personas al día, y más de 50 millones al año —, se llama así porque en su día existió allí una puerta de la muralla que cerraba la ciudad, y por ella —que miraba al este— entraba cada mañana la luz del sol. El paso del tiempo acabó con muralla y puerta, pero no pudo con el nombre del lugar, que se mantiene hasta hoy. Sol fue centro neurálgico de la capital, y escenario de muchos de sus momentos históricos: cada 31 de diciembre por las campanadas;el 14 de abril de 1931, cuando se proclamó la II República; el 15 de mayo de 2011, cuando se asentó allí el 15-M ... Llegó a ser tanta su fama, que hasta los hermanos Lumiere, inventores del proyector cinematográfico, rodaron varias películas en la Puerta del Sol. Películas que ahora se van a proyectar durante la exhibición «PiensaSol».

«No más “ruido”»

José Antonio Granero, decano del COAM, explica cómo surgió este proyecto, a raíz de conocerse la iniciativa municipal de instalar un gran kiosco en el centro de la plaza, en la que también se estudiaba plantar árboles. «Nos parecía desacertado: el kiosco era otro elemento de “ruido” en una plaza desordenada». El COAM ya trabajaba en el «Madrid Think Tank», una «fábrica de ideas» que combina los conocimientos de los profesionales con la participación ciudadana y la colaboración empresarial, para planificar acciones concretas y de largo recorrido que mejoren la vida en la ciudad.

En este caso concreto, Granero cree que a la Puerta del Sol le falta un foco cultural importante, « una pequeña subsede del Prado , por ejemplo, que se pueda recorrer en una hora, que funcione como el Museo Sorolla o como el Museo Sir John Soane en Londres».

De los cafés al «compro oro»

Sol será la primera de las iniciativas del «Madrid Think Tank» porque es, seguramente, el punto más conocido de la ciudad y porque la sucesión de actuaciones y reformas —no siempre acertadas—, le han llevado en un siglo de ser sede de algunos de los principales cafés-tertulia de finales del XIX —los tiempos del Levante, el Pombo, el Universal, o el Lisboa—, a lugar de trabajo del «Spiderman» gordo o los hombres-anuncio de «compro oro».

El proyecto «PiensaSol» cuenta con el apoyo de los gobiernos regional y municipal, el respaldo de media docena de empresas y, además, espera conseguir el interés de los madrileños, llamados a participar activamente en el diseño futuro de la plaza.

Tendrá cuatro fases: exposición, reflexión, participación y concurso de ideas. La exposición tiene como escenario la maqueta —reproducción de la plaza, situada en la sede del COAM, calle Hortaleza, 63—, que los madrileños podrán recorrer, contemplando sobre las fachadas de los edificios vídeos sobre la historia de Sol, y sentándose a descansar en la reproducción del «tragabolas» de la estación de cercanías.

Habrá audiovisuales —los de los hermanos Lumiere— que cuenten el tránsito de la plaza entre los siglos XIX y XX, y las transformaciones sufridas después;otros sobre su evolución en los planos históricos de la ciudad; una reproducción de lo que son 24 horas en este punto; y hasta sus sonidos más habituales.

Los ciudadanos que quieran aportar ideas, sugerencias o consejos podrán hacerlo a través de Twitter o facebook , o mediante fotografías tomadas por ellos, que también se mostrarán en una pantalla activa «online», un muro virtual en el que habrá «ayudantes» para digitalizar los mensajes de quienes no estén familiarizados con las nuevas tecnologías.

Concurso de ideas

En diciembre, se convocará un concurso internacional de ideas, cuyo jurado –del que forman parte políticos y arquitectos como Moneo, Tuñón, Thorne, Herreros o Zaera–, emitirá un fallo en enero. A partir de ahí, la «nueva» Puerta del Sol echará a andar.

Es, por tanto, una oportunidad para que los madrileños se impliquen en la imagen de la Puerta del Sol, que tantos cambios de imagen ha tenido a lo largo de su historia.