Besteiro da por bueno el silencio de Sacristán por el caso de su mujer

La exigencia de aclaraciones sobre lo sucedido en Culleredo por parte del jefe del Ejecutivo autonómico se sucede tras el silencio de la dirección socialista. Feijóo ha remarcado que «si no las tenemos del líder del PSOE de La Coruña o del líder del PSOE en Galicia, la prudencia nos obliga a no hacer ningún tipo de valoración».

En todo caso, y a pesar de las peticiones para que se manifestase, el secretario general de los socialistas gallegos, José Ramón Gómez Besteiro, señaló tras la Ejecutiva de su partido que «es una cuestión personal, que tiene trascendencia política menos uno» y abundando en su explicación advirtió de que «afecta al espacio privado y personal y en el PSOE tiene influencia menos uno». En todo caso, y según ha podido saber este periódico, el líder socialista habló con el alcalde de Culleredo para certificar que todo lo ocurrido no afecta al partido y en la reunión de la Ejecutiva no se trató el asunto.

Besteiro parece querer cerrar el asunto cuanto antes y trata de señalar las diferencias con otros casos en los que los socialistas pidieron explicaciones en vano. De hecho aseguró que a Feijóo se le pidieron en diversos asuntos y «no dice nada». Si todo sigue su curso, el secretario electo, Julio Sacristán, será proclamado nuevo líder del socialismo coruñés el próximo día 13 de diciembre. Su ejecutiva será reducida y estará conformada por 15 personas.

Tras este nuevo sobresalto en el seno del socialismo gallego, la dirección autonómica asegura que las cosas están saliendo bien, y que la estrategia de Besteiro de dar tiempo al tiempo está produciendo los objetivos que se planteó cuando llegó a la cima del PSdeG.

Sin embargo, ayer tuvo que volver a justificar a uno de los suyos. En este caso, le ha tocado disculpar el pasado conservador del candidato socialista a la Alcaldía de Santiago, Paco Reyes, después de que ABC publicara que había desempeñado cargos de responsabilidad durante los gobiernos de Manuel Fraga. Con cierta ironía, se ha felicitado por la evolución ideológica del concejal socialista. De hecho, ha calificado su conversión como «positiva» y celebrado que se diese cuenta que «estuvo equivocado».