Feijóo reivindica su gestión en la Xunta, de la que «se recogerán los frutos» en 2015

«Si algún día se recuerda a los gobiernos de Galicia durante la crisis, sólo que se nos diga que intentamos cumplir nuestro deber merecerá la pena, y os puedo asegurar que está mereciendo la pena gestionar en un momento de dificultar porque ahora vamos a recoger los frutos de lo que sembramos », ha señalado.

En este sentido, el máximo mandatario autonómico también ha subrayado que el gobierno gallego lleva «cumplido más de la mitad» de sus compromisos para esta legislatura y ha destacado el trabajo de su equipo que «trabaja desde la humildad y desde el respeto de servir a un pueblo que está acostumbrado a hacerle frente a los restos y a no rendirse nunca».

A este respecto, ha considerado que Galicia «da ejemplo» de responsabilidad contable desde hace cinco años y ha recordado que « tiene una deuda inferior a la de las demás comunidades ». «Galicia ahora crece y tiene el objetivo de hacerlo al 2% en 2015, mejora los registros de exportaciones, que baten récords, y crea empleo», ha celebrado.

Con todo, ha asegurado que «no basta» con hacer «una política mucho más coherente que el conjunto de las oposiciones que adornan el Parlamento de Galicia». «Tenemos que hacerlo mejor que nosotros mismos, ese es el objetivo», ha asegurado. En este sentido, ha calificado de «honor» que los ciudadanos pidan más al Partido Popular que a otras organizaciones ya que eso responde a que «los ciudadanos esperan más» del PP.

«Estamos aquí para tomar decisiones, no para lucirnos, estamos aquí para que la inmensa mayoría de los ciudadanos lleguen a fin de mes, para hacer lo que dijimos que haríamos y puedo decir que nos estamos marcando retos y que los estamos cumplimiento», ha apuntado.

Al hilo, y en una clara referencia a Podemos, ha zanjado: «Ellos pueden dibujar círculos, nosotros tenemos que cuadrar las cuentas y lo hacemos».

El líder del PPdeG también ha recordado cómo los populares gallegos ganaron las elecciones del 1 de marzo de 2009 y revalidaron y ampliaron el apoyo de los gallegos en 2012, a pesar de la «crisis» y de una oposición que «se aprovechaba de ella» para conseguir votos.

«En 2009 se derrotó la soberbia de quien se creía vencedor», ha manifestado antes de mostrarse convencido de que «en 2015 la soberbia también será derrotada del mismo modo: con humildad, con constancia y con esfuerzo».