Currás se aferra al acta y rehúsa aclarar su salida del Concello

La presencia de Currás en el gobierno local compostelano es meramente testimonial, toda vez que no forma parte del núcleo duro de Hernández, y apenas mantiene una concejalía de representación institucional carente de actividad real, aunque sí con una dedicación exclusiva.

La salida de Currás, que ahora parece rechazar él mismo, fue sin embargo una cuestión con la que especuló antes de dejar la Alcaldía en junio de este año. Según fuentes consultadas por ABC, Ángel Currás comentó a su entorno más próximo su interés por ser nombrado embajador, una pretensión que no le fue concedida.

Ajeno al futuro de su antecesor en el cargo, Agustín Hernández evitó entrar en el juego de especulaciones y se limitó a señalar que Currás tiene «todo el derecho del mundo» a aceptar cualquier puesto que se le proponga, como esta supuesta oferta para dirigir la delegación de Tragsa. «No hago ninguna valoración sobre una decisión personal. Él hizo la transferencia de la Alcaldía hacia mi persona y, a partir de eso, toma las decisiones que considera convenientes», manifestó el alcalde durante una visita a un barrio.

La salida de Currás obligaría al PP a nombrar a otro edil no electo en las pasadas municipales, después de agotar la candidatura que obtuvo la mayoría absoluta. Hernández no quiso confirmar si finalmente su antecesor entregará su acta de concejal y permitirá abrir una nueva etapa en el Concello, ni tampoco qué nombre ocupará este acta de concejal. «Me dedico a gestionar la ciudad», zanjó Hernández.