La Diputación de Lugo multiplicó por cuatro su deuda desde 2007

Poco encaje tiene en estos números el objetivo marcado por su titular, José Ramón Gómez Besteiro, de reducir a «cero» la deuda en 2016. Según la cuenta general de 2013 está asciende a 39,72 millones de euros, frente a los 10,7 que constan en el último ejercicio correspondiente al equipo del PP en el gobierno provincial.

Asimismo, tomando como punto de partida la misma comparativa, la reducción de los fondos líquidos es común en las cuentas generales bajo mandato del bigobierno. En cifras, 28.801.322 euros menos; un 34,5%.

En cuanto al capítulo de obligaciones pendientes de pago, éste arroja un incremento del 176,6 por ciento. Solo en 2013 la administración gobernada por Gómez Besteiro acumula, según datos recogidos de la Cuenta General, 50 millones de euros en facturas o transferencias a otras administraciones sin ejecutar.

De este modo, la deuda por habitante (operaciones de crédito a largo plazo) aumentó en 84,49 euros, frente a los datos de 2007; los fondos líquidos (dinero en las cuentas de la Diputación) pasaron de 83.351.379 euros hace siete años a 54.550.057; y las obligaciones pendientes de pago (facturas o transferencias sin abonar) se incrementaron desde los 18.832.821 euros a los 52.100.445.

Entre el ejercicio de 2006-2007, previo a la entrada del hoy secretario general de los socialistas gallegos como presidente provincial, el endeudamiento se había logrado reducir en 4,2 millones de euros, disminuyendo la cifra de deuda por habitante de 42,02 a 30,31. En cuanto a los fondos líquidos, se habían incrementado en 17,3 millones.

Números que ejemplifican, a juicio del PP de Lugo, «la mala gestión de la Diputación a manos de Besteiro». «A día de hoy los lucenses deben más y tienen menos en las arcas provinciales, pese a que se gobernó para una minoría; de espaldas al 64% de los concellos», aseguraba este viernes la diputada popular Elena Candia al respecto de las cuentas.