La grúa cuesta en Lugo 1.000 euros por vehículo retirado

Un servicio «deficitario» en opinión del PP, que como ejemplo señala que la cifra supera con creces el «salario mínimo interprofesional». Una sangría económica para la hacienda lucense derivada de un «contrato inflado» y que hoy acumula un déficit de 3,5 millones de euros por la escasez de enganches. Así lo asegura el edil popular Enrique Rozas, quien manifestó que «esta desorbitada factura la pagamos todos los lucenses».

En esta misma dirección, recordó Rozas que el PP fue el único que en 2005 se opuso a una operación que ya entonces su grupo calificó de «ruinosa».

No se escapó la concesión a las manos de la juez Pilar de Lara en el marco de la «operación Pokemon», que investiga una supuesta trama de sobornos a cambio de contratas públicas. «[...] había directrices de que las grúas no funcionasen, facturas falsas generadas supuestamente para justificar gastos no reales en ruedas, combustible [...]», recoge el sumario del caso.

Rozas, a quien no le salen los números, reclama que se elabore una valoración técnica sobre los costes de rescisión del contrato con la concesionaria —finaliza el 1 de diciembre de 2015— y, en el caso de confirmarse su rentabilidad, propone su municipalización. El concejal no descarta que el coste sea menor al de los años que restan.