Todas las pruebas que apuntan hacia Rosario y Alfonso por el asesinato de Asunta

Las investigaciones han dado con elementos que sitúan a los padres como autores del asesinato de la pequeña Asunta

Todas las pruebas que apuntan hacia Rosario y Alfonso por el asesinato de Asunta xan pita

j. p.

El levantamiento del secreto de sumario permite poner en orden una serie de pruebas (de las que la mayoría ya eran conocidas) que apuntan a Rosario Porto y Alfonso Basterra como supuestos asesinos de su hija Asunta.

Estos elementos, en su mayoría ... pequeños detalles, ayudaron a los investigadores a recomponer la tarde y la noche de aquel 21 de septiembre de la aparentemente feliz familia Basterra Porto.

Los teléfonos móviles

El móvil de Rosario Porto fue clave para contradecir su versión: que no había ido a Teo a lo largo de la tarde. La triangulación de la señal del aparato permitió averiguar donde había pasado la abogada esas horas . Otro móvil, en este caso el de Asunta, habría sido empleado por la propia Porto para enviarles mensajes a sus amigas diciéndoles que estaba estudiando. Un tercer teléfono es todavía un agujero en la instrucción: un segundo aparato que supuestamente poseía Alfonso Basterra.

La cuerda naranja

La cuerda naranja fue uno de los primeros elementos de la investigación que fue filtrado a los medios. Se halló un trozo de este material, que también estaba presente en la casa de Teo, en el lugar donde apareció el cadáver de Asunta, y se cree que con ella pudieron haber atado a la niña . El abogado de Porto, José Luis Gutiérrez Aranguren, descartó en su día que esto fuese concluyente, alegando que es un tipo de cuerda utilizado ampliamente en zonas rurales.

Las cámaras de seguridad

Las cámaras de seguridad de diferentes lugares del Ensanche compostelano —entre ellos el propio Parlamento gallego—fueron testigos, según se recoge en el sumario, de los movimientos de Asunta y su madre durante aquel 21 de septiembre: su salida del piso de Basterra en dirección al de Porto y de éste último hacia Teo , montadas las dos en un Mercedes verde.

La alarma de Teo

Su afán de mantener la seguridad en el chalé de Montouto (Teo) pudo haber jugado a Rosario Porto una mala pasada , ya que el registro de la alarma señala que fue desactivada, para entrar al domicilio, en torno a las seis y media de la tarde, y activada de nuevo dos horas más tarde.

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