Así funciona el centro de teleasistencia de Valencia

El programa municipal, que va dirigido a personas empadronadas en Valencia con problemas de movilidad y escasos recursos económicos, es gratuito y funciona en colaboración con una empresa adjudicataria, Servicio de Teleasistencia. En el último año, según ha señalado Rita Barberá, se ha destinado más de un millón y medio de euros al servicio que atiende 24 horas al día tanto urgencias como llamadas rutinarias para comprobar que los usuarios estén bien. «Se trata de un programa excelente hecho por gente que trata con mucho cariño a los usuarios», ha señalado la primera edil.

A través de una base de datos, se obtiene toda la información necesaria para que desde el centro se pueda conocer el estado de salud de cada usuario así como sus rutinas. Cada día, comprueban el estado de salud de cada uno de ellos para verificar que no necesitan asistencia médica.

En este sentido, la alcaldesa ha apuntado que reciben la valoración «más alta de los usuarios» y que a pesar de recibir una gran cantidad de llamadas al día, solo un 5% son de emergencia -una media de trece llamadas- y por lo tanto, el resto son «de contacto». Por todo ello, ha recalcado: «Valencia lidera con mucha excelencia este servicio».

«Estas personas necesitan sentirse acompañados», ha continuado Barberá. Con este servicio, remarca, se busca «mejorar la autonomía de los usuarios», para que estén en sus casas el mayor «tiempo posible». Además, no tienen lista de espera, por lo que tienen capacidad para poder «atender a varios centenares de personas más».

Durante la visita, la primera edil ha conocido cómo funcionan el centro de atención telefónica, la sala de formación, la coordinación de zona, las unidades móviles y los diferentes dispositivos y ha compartido un momento muy particular con los participantes de un taller de risoterapia que se estaba celebrando.

Además, ha explicado que el servicio se empezó a prestar en 1999 a través de un convenio con el IMSERSO y Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) y cuando acabó el Ayuntamiento lo mantuvo con su propio presupuesto.