A por la «licenciatura» en pactos

Un mandato llamado a convertirse en toda una licenciatura para especializarse en pactos. Si el acuerdo es algo de lo que Herrera ha hecho siempre gala y bandera, en esta ocasión no haber revalidado la mayoría absoluta (se quedó a tan sólo un escaño de lograrlo, consiguiendo justo la mitad de los 84 escaños) obliga a practicar con el ejemplo. El propio jefe del Ejecutivo reconoció en su investidura que ahora «más que nunca» el diálogo y el acuerdo han de ser guías y ejes de la actuación , en busca del entendimiento entre «todos, independientemente de nuestras mayores o menores coincidencias ideológicas o programáticas». Y muchos son los capítulos del temario.

La vista está puesta de forma obligada en «consolidar» la recuperación económica, alentada por los datos de «esperanza», pero sin perder de vista las «incertidumbres» que aún atenazan y que resta camino por recorrer. Por eso, dejar atrás la crisis y que las listas del desempleo sigan soltando el pesado lastre que acumulan es el objetivo prioritario y capital marcado por Herrera de cara al nuevo mandato. «El empleo es el bien social más importante», de ahí que el «primer» acuerdo del Diálogo Social será una nueva Estrategia Integrada de Empleo, Formación Profesional, Prevención de Riesgos Laborales e Igualdad y Conciliación en el Trabajo 2016-2020.

Dotado con al menos 600 millones de euros , tendrá en el empleo juvenil su prioridad, con no menos de 10 millones a este capítulo, sin olvidar también a los parados de larga duración y a los colectivos con dificultades especiales, prestando especial atención a quienes tienen responsabilidades familiares. Y en la recuperación también es clave la labor de los empresarios. De ahí la apuesta por aumentar el tejido empresarial, con la meta de favorecer que 8.000 nuevas empresas (mil de base tecnológica) abran sus puertas en los dos primeros años de legislatura y que en 2020 la industria suponga el 20% del PIB regional.

El Consejo del Trabajo Autónomo y una estrategia dirigida a este colectivo clave en la economía castellano y leonesa (podrá tener también la ayuda de 426 euros al mes si tienen que cesar su actividad y no tienen más prestaciones), facilitar la financiación o incentivar las cooperativas, también figuran entre los deberes a cumplir por Herrera, sin olvidar el impulso a la internacionalización, la apuesta por el campo y la creación del Defensor de la Cadena Alimentaria y un observatorio de precios. Junto al empleo y la recuperación, garantizar los grandes servicios públicos y fortalecer el proyecto de Castilla y León como Comunidad sustenta las otras dos patas de la mesa de acción de «prioridades».

Y todo sin olvidar que, tras unos años en las que las «conductas inmorales y deshonestas» han puesto en tela de juicio a los políticos y desprestigiado su labor, la «mejora de la calidad de la política» es «urgente». Y ése será uno de los primeros temas que aborden las Cortes en el arranque de su actividad ordinaria. Además de como un compromiso, el presidente situó como una «obligación» avanzar «aún más» en esa dirección ya emprendida , en la que llamó a hacerlo de la mano de un «gran pacto» que permita, a través de la reforma del Estatuto de Autonomía y del Reglamento de las Cortes, introducir esas premisas que ayuden a recuperar la confianza ciudadana y reflejen el nuevo mapa político dibujado por las urnas. Con los cambios en el primer texto, lo «primero» que Herrera planteó es «blindar los avances sociales», garantizando por ley a través del Estatuto que al menos se destinará el 80 por ciento del gasto no financiero disponible por las consejerías de la Junta, además de «fortalecer» el papel de las entidades locales.

Capítulo destacado para la incorporación de «nuevas exigencias sociales» en materia de calidad democrática, como la «limitación» de mandatos de los responsables políticos, así como de sus aforamientos; poner tope al número de consejerías, «adecuar» la cifra de procuradores o la «incompatibilidad» de este cargo con el de alcalde de un municipio de más de 20.000 habitantes -al menos dos están en esta situación actualmente: los regidores populares de León, Antonio Silván, y Salamanca, Alfonso Fernández Mañueco-. «Excluir» de sus responsabilidades públicas a todo cargo político una vez abierto juicio oral por corrupción es otra de las propuestas lanzadas por Herrera que tratará de encontrar el entendimiento con el resto de fuerzas.

Un «amplio acuerdo» está lanzado a alcanzar también el presidente de la Junta para la comprometida reforma del Reglamento de las Cortes. ¿El objetivo? Lograr que la actual regulación de la Mesa del Parlamento sea sustituida por otra «más equilibrada y ajustada a la nueva realidad» del hemiciclo, de forma que «garantice» la presencia de todos los partidos con grupo propio. Aquí hay voluntad de todos a favor del cambio, pero la clave estará en concitar las pretensiones de unos y otros.

Y es que el PP apuesta por mantener la proporcionalidad de su mitad de la Cámara también en la Mesa, mientras que especialmente los nuevos (Podemos y Ciudadanos) reclaman más peso para ellos. Un mayor acceso a la información , ampliar a enero y julio el calendario parlamentario, que los ciudadanos puedan defender sus propuestas bajo la fórmula de Iniciativa Legislativa Popular son otras de las propuestas «abiertas». Además, Herrera también planteó un código de austeridad y buenas prácticas para los altos cargos, que un consejero no pueda estar en el mismo departamento más de ocho años, consultar al menos tres ofertas en los contratos menores e incluso que en el sistema educativo se incluyan contenidos éticos y valores contra la corrupción.

«Valor, principio y fortaleza» de las políticas públicas en materia social, económica y de empleo, el presidente de la Junta pondrá de nuevo su empeño en seguir avanzando de la mano de empresarios y sindicatos en el Diálogo Social que él mismo impulsó al tomar por primera vez las riendas del Colegio de la Asunción. Y con ese espejo de entendimiento delante, ahora el nuevo paso será «mejorar» la participación de la sociedad civil, sin olvidar la oferta permanente al entendimiento con el resto de fuerzas.

«Ningún impuesto nuevo que pueda afectar a las familias, pymes o autónomos». Es una de las promesas en política fiscal de Herrera de cara al nuevo mandato , en el que también se intentará acotar más el fraude y 2016 será el año llamado a hacer desaparecer del todo el conocido como céntimo sanitario, instaurado en 2012 y rebajado este ejercicio. Una nueva rebaja en el tramo autonómico del IRPF y continuación con los beneficios en vigor trazan también el mapa.

El modelo de financiación autonómica en vigor desde 2009 de la mano de Zapatero no gustó y el presidente de la Junta sigue clamando por una «reforma urgente» para «corregir» el actual desfase de 500 millones entre lo que transfiere el Estado y lo que cuesta mantener los servicios públicos esenciales. Aquí también reclama una posición de Comunidad que haga fuertes las demandas de Castilla y León.

Con el objetivo de «mantener» la buena valoración y «posición de liderazgo» en los grandes servicios públicos, sanidad, educación y servicios sociales tendrán «máxima prioridad presupuestaria», de modo que el gasto para estas tres áreas suponga al menos el 80% de lo disponible para las consejerías. En estas materias, entre los compromisos de Herrera figuran extender a toda la población el servicio de información telefónica de urgencias que ya funciona en Pediatría; seguir disminuyendo la tasa de abandono escolar temprano y fracaso escolar o ampliar las ayudas de comedor escolar, además de arbitrar un nuevo sistema de ayudas para másteres. De los 2.000 millones para un plan de inversiones, 600 estarán reservados a sociales prioritarias.

Entre los retos destacados que también debe abordar Castilla y León está el demográfico para volver a la senda del crecimiento de población que se logró en los primeros años de este siglo. Por eso, Herrera dejó claro que la recuperación económica y el empleo son vitales para ganar habitantes, por lo que ambas políticas deben ir unidas. Y dentro de la «urgencia» para dar respuesta a este «problema», el presidente de la Junta no sólo busca un «gran pacto» dentro de la Comunidad , sino que incidió en la importancia de abordarlo tanto dentro del conjunto de España como de Europa, donde otras regiones también están afectadas. Jóvenes, familias a inmigrantes, principales colectivos de atención como motores del crecimiento demográfico buscado y deseado.

Firme defensor del modelo autonómico, Herrera no se olvidó de su apuesta por «seguir mejorándolo». Entre las propuestas, la reforma del Estatuto de Autonomía, continuar firmando acuerdos con otras comunidades para prestación de servicios o temas de interés común, o la reforma del Senado, para que «se convierta en una verdadera cámara territorial» . La apuesta permanente por el medio rural y el desarrollo de la Ley de Ordenación del Territorio, a la que busca que se sumen las nuevas fuerzas políticas, forman también parte de la cargada agenda de trabajo en esta nueva legislatura..