Alberto Fernández: «No interpreto los nombramientos de Aznar»
Alberto Fernández se negó ayer a valorar el cambio de cartera ministerial del que hoy por hoy se perfila como su principal rival para encabezar la candidatura del PP en las próximas elecciones autonómicas, mientras el resto de los partidos señalaban la «pérdida de peso» de Piqué en el Ejecutivo.

BARCELONA. El presidente del PP catalán, Alberto Fernández, se negó ayer a valorar la incidencia del cambio de ministerio de Josep Piqué, hasta ahora titular de Exteriores y desde ayer ministro de Ciencia y Tecnología, en las candidaturas del PPC en el próximo ciclo electoral. «No interpreto los nombramientos del presidente Aznar» se limitó a afirmar por única respuesta ante las preguntas sobre el significado del nuevo destino de Piqué.
A pesar de las constantes especulaciones sobre la posibilidad de que Piqué sustituya a Alberto Fernández como candidato popular a la presidencia de la Generalitat, el presidente del PPC insistió ayer en que la remodelación de Gobierno emprendida por José María Aznar no debe leerse en clave electoral.
«Todo lo relativo a los candidatos se abordará cuando toque» reiteró Alberto Fernández, que tampoco admitió que la salida de Anna Birulés del Ejecutivo y el cambio de Piqué impliquen una pérdida de peso del PP catalán en el Gobierno. «No se pueden hacer interpretaciones en clave regional», advirtió el líder del PPC, tras destacar que también comunidades autónomas como Galicia o Castilla han perdido peso, según esa teoría, tras la salida del Ejecutivo de Pío Cabanillas o Juan José Lucas.
Sin embargo, el resto de las formaciones políticas catalanas coincidieron en valorar la remodelación como una pérdida de peso de Josep Piqué en el Ejecutivo. Así, el secretario general de CiU, Josep Duran Lleida, afirmó que Piqué «pasa a tener la responsabilidad de un ministerio menor» y aseguró que su condición de jefe de la diplomacia española «no le ha servido absolutamente de nada» a Cataluña. Además, Duran restó importancia a la posibilidad de que el titular de Ciencia y Tecnología encabece la candidatura del PP a la Generalitat. «Se habla de que tendrá más tiempo para contactar con la sociedad o especialmente con el empresariado», dijo Duran, pero recordó que Piqué ya ha sido ministro de Industria y «ha tenido tiempo de contactar» con los empresarios, pese a lo cual el crecimiento del PP en Cataluña en las últimas generales, en las que ya fue cabeza de lista, «estuvo muy por debajo del crecimiento medio en toda España».
Democracia interna
Además, Duran criticó el «déficit democrático» del PP a la hora de nombrar a sus candidatos electorales, en referencia a la designación de Alberto Ruiz Gallardón como alcaldable en Madrid. Duran advirtió de que los militantes «tendrán que juzgar» ese método, muy similar al escogido por Jordi Pujol a la hora de decidir quien le sucedería como candidato a la presidencia de la Generalitat.
Por su parte, el presidente del PSC,Pasqual Maragall, consideró que «los catalanes duran poco en sus sillas», en los gobiernos del PP. Maragall se refirió también a la oferta a Miquel Roca del Ministerio de Exteriores, para recordar que el lance a CiU comenzó hace medio año y constatar que «no se sabe -dijo- si es una oferta amistosa o hostil».
El presidente de ICV, Joan Saura, coincidió también en que en el nuevo Gobierno «ha disminuido» el peso político de Piqué y lo achacó a un «castigo» por su labor durante la presidencia española de la UE y a que «está inmerso en un proceso judicial», en referencia al «caso Ercros».
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