Dónde comer cerca del Estadio de la Cartuja de Sevilla

Pero un poco más allá, en el entorno del Puente del Alamillo y el Puente de la Barqueta, encontramos establecimientos hosteleros capaces de satisfacer todo tipo de exigencias.

Desde restaurantes a mesa y mantel a espacios de moda junto al río, sin olvidar gastrobares, barras de tapas e incluso negocios con aires internacionales.

La variedad de estilos culinarios está sobre la mesa y estamos convencidos de que la experiencia en el Estadio de la Cartuja será más satisfactoria si se acude con los deberes gastronómicos bien hechos.

Comenzamos con Bonobo, un reciente espacio que abrió sus puertas en mayo de 2024 y ofrece una completa propuesta tanto para comer como Dios manda como para picar o disfrutar de la sobremesa.

Ubicado junto al Guadalquivir a los pies del Puente de la Barqueta, se distribuye en dos alturas: la terraza de arriba se destina a gastronomía y la inferior a copas.

Arriba, encontramos mesas altas para un picoteo más informal o para tomar un vermouth y una tapa, aunque la mayor parte del espacio está integrada por mesas bajas para una experiencia más reposada.

En lo gastronómico, hay un apartado de entrantes elaborados, además de una gran variedad de arroces secos y caldosos. Las carnes ibéricas también tienen mucho que decir, además de los pescados a la brasa.

La terraza de abajo está especialmente pensada para cócteles y copas en un ambiente chill-out, con cómodos sillones junto al río y acceso directo desde la calle.

A solo unos minutos del Estadio de La Cartuja, Arrozante se presenta como una opción tranquila y elegante para los que buscan una experiencia gastronómica reposada. Este restaurante, ubicado en el Hotel Barceló Renacimiento, convierte el arroz en el eje de su propuesta.

Su carta del mediodía incluye una selección amplia de arroces y fideuás, ideales para compartir antes de acudir al Estadio. El arroz es el protagonista indiscutible de la carta, tanto en paella como caldoso, aunque también se pueden pedir otras recetas de corte mediterráneo.

Por la noche, el protagonismo lo toman los entrantes, las carnes y los pescados. Con varios salones y una zona de terraza, es perfecto tanto para comidas en grupo como para quienes buscan desconectar del bullicio previo a evento en cuestión.

Continuamos con un restaurante ya consolidado en Sevilla como es La Cochera del Abuelo, ubicado en las inmediaciones de Torneo y pensado para quienes quieran darse un homenaje selecto antes de ir al Estadio de la Cartuja.

Se trata de un concepto diferente con tintes de bistró elegante donde el comensal encuentra un espacio inusual, como es la antigua cochera de una casa del siglo XIX reconvertida en restaurante donde se cuida hasta el más mínimo detalle. Sus responsables, Cinta Romero y Bosco Benítez, son de la opinión de que una restauración de aire informal puede servirse en un ambiente elegante con mesa y mantel, además de un cuidado menaje.

Ensaladas originales elaboradas con productos de temporada, guisos caseros y una carta de postres en la que destaca su famosa tarta de quesos son la esencia gastronómica de este espacio.

Uno de los clásicos de esta zona del barrio de San Lorenzo que asoma a Torneo es el restaurante Manolo León de la calle Guadalquivir. Ocupa una casa señorial del siglo XIX y condensa su esencia en diversos salones, aunque la joya de la corona es la terraza.

La atmósfera que ideó el desaparecido Manolo León se mantiene: la elegancia en la mantelería , el servicio de trato exquisito, la decoración personal y cargada de tradición.

Gastronómicante, destacan recetas como las judías pochas con langostinos o sus emblemáticas croquetas, aunque cualquiera de sus carnes, pescados o postres caseros también justifican la visita.

El Bar Antojo propone un ambiente informal y acogedor donde degustar las tapas sin prisas, como en casa. Esto se consigue con una decoración cálida , un espacio amplio y, por su puesto, dedicándole tiempo a la comida, que derrocha creatividad .

El espacio de Antojo, perteneciente al grupo Tu hogar fuera de casa, es muy amplio, con salida a la calle Calatrava y otra achaflanada en la intersección de esta con la calle Vib Arragel. Cuenta, además, con unos enormes ventanales inundan de luz las salas y dejan ver el puente de la Barqueta . Separado en dos ambientes -a diferente altura- por una pared con el ladrillo visto en una cara, y recubierta de azulejo azul verdoso por la otra.

En su carta encontramos desde guisos tradicionales a la cocina más en tendencia. Risotto trufado, tataky de atún, gyozas de pollo o su famoso carbón de bacalao son algunas de las recetas más consolidadas.

Otro de las clásicos de la Alameda es este espacio del grupo La vida en tapas, decano en la zona que se hizo famoso por su manera de reinventar las tapas cuando Sevilla seguía sumida en el clasicismo gastronómico.

Su propuesta no ha pasado de moda y sigue atrayendo a público local y extranjeros, con una selección de tapas reinterpretadas entre las que destacan salmorejo de manzana y rúcula, alitas bbq o carrillada con parmentier, entre otros.

Risotto de boletus, tempura de verduras o empanada argentina son otras de las opciones que ofrecen.

Aunque se encuentra en la zona de La Macarena, algo más alejado del Estadio de la Cartuja, este bar tradicional es una parada muy recomendable para quienes quieran comer bien antes del partido o el concierto sin complicarse mucho la vida. Ambiente de barrio, cañas bien tiradas y una carta de tapas generosa y sin artificios.

Entre las especialidades de El Colmao de Gascón Rubio destaca una de las tapas más celebradas por su clientela habitual: las migas con huevo frito, pimientos y jamón.

También triunfan el salmorejo, los calamares a la plancha y las gambas y langostinos. Una opción con sabor clásico y precios ajustados para abrir boca antes de ir al Estadio.

La Sevillana abrió la primavera de 2024 junto al Puente del Alamillo y es una parada idónea para quienes busquen cervezas y tapas en un ambiente informal.

Se trata de una cervecería de grandes dimensiones donde tomar Cruzcampo fría y tapas tradicionales. Funcionan con autoservicio para poder atender al númeroso público que es capaz de acoger el local.

Tienen tapas frías como ensaladilla de gambas, tomate aliñado con ventresca o aliño de merluza. También fritos: chocos de Isla Cristina, adobo a la sevillana, croquetas de caña de lomo o boquerones al limón.

En el apartado de montaditos destacan el de pringá y el serranito. Otra de sus propuestas fuertes es carrillada a la plancha, además de guisos del día.

Un año después de abrir La Sevillana, el mismo grupo decidió abrir La Sevillana Burger en la misma avenida, junto al Puente del Alamillo.

Su propuesta consiste en una selección de entrantes a burgers de carácter andaluz y perritos. La carta es sencilla y directa, con una selección de una docena de recetas que condensan la filosofía de este nuevo espacio.

Las hamburguesas son de carne de cerdo, de pollo o de chuletón madurado, como ocurre con La Sevillana, que lleva además queso, bacon y salsa de la casa.

Además de las burgers, tienen una sección de Franckfurts con toques originales: La Malagueña (butifarra y morcilla), La Pikantwurst (carne de cerdo ahumada) o La de Pinchito (un pinchito con forma de salchicha).

Concluimos esta lista de recomendaciones con una propuesta con sabor internacional: Kim's Bap, un espacio de cocina coreana que lleva varios años asentado en plena calle Lumbreras.

Su propuesta gastronómica puede disfrutarse en su local de la calle Lumbreras, sentado en las pequeñas barras con cristaleras a la calle, o en formato para llevar, ya que trabajan con las principales plataformas de «delivery».

Está especializado en «ramen», fideos en sopa, «topoki», masa de arroz glutinoso combinada con diferentes salsas y complementos, «mandu», unas empanadillas estilo gyoza pero en versión coreana, «bibimap», sushi coreano, y todas las variedades posibles de «kimbap» , arroces con diferentes, como el de tofu frito con verduras y huevo frito o el de cerdo picante. Uno de sus platos estrella es el kimchi casero.