Mr. Kingsway, el mono de Gibraltar que quiso ser español

Ha sido un ejemplar macho, al que han bautizado esta semana Mr. Kingsway, el que ha protagonizado la fuga más sonada de Gibraltar. Su nombre no es casual. Se cree que el macaco bajó de la Reserva Natural donde viven unos 200 ejemplares y recorrió el nuevo túnel construido bajo la pista del aeropuerto de Gibraltar para luego cruzar la Verja sin que nadie se percatase y llegar hasta La Línea de la Concepción.

Dicho túnel, que abrió al tráfico rodado en marzo del año pasado, fue bautizado Kingsway —el camino del Rey en castellano— y ha sido también el nombre elegido para bautizar al fugitivo.

El mono, que fue visto primero en dos institutos de La Línea de la Concepción, terminó en la populosa barriada de San Bernardo. Tras más de 24 horas y un amplio dispositivo policial que le seguía la pista por tierra y por aire mediante drones, pudo ser capturado con dardos tranquilizantes disparados por miembros del equipo veterinario que los cuida en la colonia británica.

Se trata de una fuga inédita. Nunca antes se había producido algo igual. Sí han sido recuperados algunos ejemplares que habían sido 'robados' por turistas que afirmaron que se ocultaron en sus vehículos, como aseguró un vecino de El Campillo, en Huelva, a la Guardia Civil en 2008.

ABC ha preguntado al Gobierno de Gibraltar si va a tomar medidas para evitar nuevas fugas, pero no lo considera necesario. «No se han promulgado nuevas medidas, la legislación actual es muy amplia y es suficiente», indicaron fuentes del gobierno del Peñón.

Según se explicó, en la Reserva Natural de Gibraltar, en lo más alto del Peñón, hay censados 200 ejemplares divididos en siete manadas. Estos monos viven en libertad. La mayoría de las hembras son sometidas a ligaduras de las trompas de Falopio, una intervención que se realiza mediante lamparoscopia. Estas intervenciones tienen como objetivo evitar la rápida expansión de las manadas y que la población se descontrole y genere problemas.

Los machos, al alcanzar la madurez sexual, se vuelven periféricos a las manadas y emigran en busca de una nueva para integrarse en ellas. Se trata de un comportamiento natural para evitar la endogamia, aclaran las mismas fuentes.

Hace unas semanas, una cría de macaco cayó al mar. Fue dentro de la zona de la Reserva Natural, por lo que desde Gibraltar se asegura que no estaba intentando encontrar un nuevo territorio sino que fue un «desafortunado accidente, ya que se trataba de un macaco joven que no podía escalar la pared del acantilado». Pese a ser rescatado murió poco después.

En los últimos años han sido además atropellados varios ejemplares, por lo que se ha limitado la velocidad del tráfico rodado a la zona. Uno de las crías que murió atropellada era gemelo de otro, algo muy inusual en esta especie.

Mr. Kingsway ha sido devuelto esta misma semana a su hábitat para tranquilidad de sus cuidadores y regocijo de los gibraltareños. Y es que, según la leyenda, siempre que queden monos en el Peñón, Gibraltar seguirá siendo británico, lo que los ha convertido en todo un símbolo de la última colonia de la Unión Europea.

El esquivo macaco ha sido liberado tras recibir tratamiento veterinario debido al estrés que soportó en su fuga. Se le ha implantado además un microchip después de esta gran aventura para tenerlo localizado e identificarlo fácilmente si le da por volver a las andadas para cruzar de nuevo La Línea de la Concepción y ser español.