Morbo en el Parlament: PP y la CUP podrían compartir el Grupo Mixto

Ambas candidaturas no cumplen con el requisito de los cinco parlamentarios - los populares tienen solo 3 diputados y los «cuperos» 4 escaños- necesarios para formar su propio grupo parlamentario y podrían verse forzados a repartirse portavocías o tiempos de intervención

El candidato del PP, Xavier García Albiol (dcha), junto a la exparlamentaria de la CUP Anna Gabriel (izda) y otros exdiputados de la formación anticapitalista INÉS BAUCELLS

Carlos Manso Chicote

22/12/2017 a las 00:15h.

Los resultados electorales en Cataluña dejan un hemiciclo lleno de paradojas: una victoria en votos y escaños para Ciudadanos (meter datos), pero una mayoría absoluta, más ajustada, para el bloque independentista. Sin embargo, el morbo va a estar en los escaños más elevados del ... hemiciclo: Con 4 escaños la CUP y apenas tres diputados el Partido Popular (PP) se verían obligados a compartir el Grupo Mixto en la próxima legislatura a menos que la Mesa haga una interpretación diferente del Reglamento u otro partido le «preste» un parlamentario a alguno de los dos en el momento de la constitución.

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Según los artículos 29 y 30 del Reglamento del Parlament , para formar un grupo parlamentario - con lo que en términos de subvenciones, capacidad de iniciativa y tiempo para intervenir significa- son necesarios un mínimo de cinco miembros que deben «pertenecer a un mismo partido partido o coalición electoral» independientemente de la circunscripcióin electoral. Nada de esto cumplen la CUP y el PP. En concreto, el primer artículo mencionado - el 29- establece que el Grupo Mixto tiene los mismos derechos que el resto de grupos parlamentarios. También cada uno de los diputados que lo conformen conservan sus derechos como parlamentarios, en igual de condiciones al resto de los parlamentarios.

Una convivencia forzosa

En principio, según el artículo 30 del Reglamento , el Grupo Mixto puede constituir subgrupos parlamentarios «integrados por un mínimo de tres diputados pertenecientes a un mismo partido, federación o coalición electoral». Esta opción permitiría que cada miembro del subgrupo pueda asistir «con voz y voto» en la Junta de Portavoces.

Por otra parte, los subgrupos pueden tener iniciativa legislativa y suscribir las iniciativas de otros grupos parlamentarios. Ahora bien, según el cuarto y último punto de este artículo, los miembros del Mixto tendrán que ponerse de acuerdo en materias como el número de diputados en las comisiones, los tiempos de intervención, el número de interpelaciones o de preguntas orales al Govern en las sesiones de control. Si no llegaran a un acuerdo, cosa no descartable ante el abismo político que separa a ambos partidos , la Mesa del Parlament haría de árbirto y establecería «la distribución proporcional de todas estas cuestiones entre los subgrupos»

Este particular matrimonio de convivencia, en camas separadas, podría evitarse si l a Mesa del Parlament realizara una interpretación laxa del Reglamento y permitiera que anticapitalistas y populares pudieran conformar sendos grupos parlamentarios independientes. O que otra formación les «preste» un diputado en el momento de la constitución de todos los grupos.