La vuelta a Menorca, un suplicio

El A2 Brujo, de Alberto de Castro y Jose Luis Francés, ya ha superado este difícil tramo del recorrido y han pasado esta madrugada por el control de paso de la isla del Aire en el SW de Menorca. Tras superar este punto han podido navegar al socaire de la isla de Menorca y les ha servido para descansar y retomar fuerzas de nuevo, ante el próximo reto, dejar cabo Artrutx y enfilar la proa rumbo hacia el Port Olímpic de Barcelona, línea de meta de la regata. Será otra dura travesía, porque las extremas condiciones de viento existentes en estos momentos en el canal Balear, trozo de mar que separa las islas baleáricas de la península Ibérica. El viento en esta zona también sopla de forma extrema. ‘Tenemos vientos de más de 25 nudos –nos comentaban desde el Brujo, antes de abandonar la isla y perder la cobertura de comunicación- Promete que la travesía hasta Barcelona será dura’ nos dijeron cuando ya estaban a punto de salir de la protección de la costa del Sur de Menorca y entrar de nuevo en mar abierto.

Alberto y José Luis van al límite de fuerzas, y con ganas de alcanzar la protección del socaire de la costa peninsular, a la espera que superada la longitud de Cap Creus el mar no esté tan bravo como el que han tenido por el mar de Cerdeña y sea más manejable de navegar. El Comité de Regata los esperan, en las próximas horas, en la línea de llegada en el Port Olímpic de Barcelona.

El resto de la flota continua luchando ferozmente con el fuerte viento que sopla al Este de Menorca. El A2 Granell, de Agustín Granell y Kiko Moret, están a solo 35 millas de la isla del Aire. Van a una velocidad promedio de 8 nudos, con rumbo 244º, en una zona donde el viento supera los 30 nudos de presión y con mar muy arbolada.

Detrás de ellos, a unas 85 millas del control de paso de la isla delAire, se encuentra el A2 Sushi Bar, de Daniel Martín y Bartolomé Pascual. Van con un rumbo 240º y también con unas condiciones meteo similares a las del Granell, en una zona con rachas de hasta 40 nudos de punta. Van a un promedio de velocidad de 8 nudos, como el velero con tripulación completa Somni, de Enric Picanyol, que se encuentra navegando junto el Sushi Bar, en paralelo, separados, entre ellos, en menos 6 millas.

Más al Este se encuentra el Seven’s Too, de Pepe Cernuda, que navega también en esta dura zona del mar de Cerdeña, en una zona donde el viento sopla algo más del NW. Están luchando contra fuertes rachas, que les obliga a mantener un rumbo más abierto, al través, lo que le hace alcanzar promedios de velocidad que rozan los 9 nudos.

Informar que en esta parte más oriental del mar de Cerdeña, la embarcación A2 Talasur, de Urko Longas y Julio Bernabeau, decidieron, a última hora de ayer, antes del ocaso solar, cambiar de su rumbo del 240º y virar 180 grados y enfilar la isla de Cerdeña. En estos momentos están navegando con normalidad, con vientos portantes al rumbo 135º, parece que con intención de alcanzar la costa sarda de Asinara o la del cabo Comte, para hacer recalada en el puerto de Alger.