Sara Sorribes, en cuartos por garra y fe

Con el Estadio Manolo Santana algo frío, por público y temperatura, comenzó Sorribes también algo tensa, midiendo los tiempos y los puntos débiles y fuertes con la rusa, contra quien se había enfrentado en dos ocasiones, con una victoria sufrida de la rival (4-6, 6-4 y 6-4) y con una paliza de la española unos meses después (6-0 y 6-0). Pero aquello fue en 2015, y Sorribes tenía que volver a evaluar el crecimiento de su rival y el suyo propio.

Se tentaron, se estudiaron. Y la fórmula de Sorribes era clara: evitar la derecha potente de Kasatkina, con la que abría pista y marcador cuando cogía la pelota alta y con tiempo para girarse sobre ella. El revés fue el líder del partido, con el que la española se encontró cómoda, con el que halló los titubeos de la rusa.

Pero tuvo que pelear, de lo lindo. Rápida Kasatkina con su derecha y con sus piernas, afinó los tiros en el segundo set, más entonada y aprovechando un bajón de energía de Sorribes. Fue como un respiro; ese pasito atrás para dar dos hacia delante .

Porque a fuerzas igualadas, a estrategias aprendidas, a tenis parejo, Sorribes encontró la tranquilidad y la garra que lleva tiempo acumulando en la cabeza. Paseos cortos de lado a lado de la pista, respiraciones profundas, parones estratégicos para ajustarse los cordones y dibujar el siguiente punto. Sin desfallecer a pesar de cómo Kasatkina quiso llevarla de lado a lado. Desfallecida la rusa de tanto que tenía que trabajarse cada punto. En la carrera de fondo en el que se convirtió el tercer set, Sorribes, que hace tiempo que pelea cada día por ser esa mejor versión de sí misma con la que

Con ese discurso de saber que hay cosas mucho más importantes en la vida que darle a la pelota, ha hallado el mejor nivel de su carrera. Estrenado su palmarés individual en Guadalajara en 2021, campeona en Estambul en dobles hace unas semanas y llenando de ilusión el Estadio Manolo Santana. Sin querer llamar la atención, en cuartos. Eufórica en el centro de una Caja Mágica rendida a sus pies.