Castro guarda silencio y Del Nido señala que espera «lo que hemos pedido»

Ambos han llegado puntualmente acompañados de sus abogados, incluido Alberto Pérez Solano, responsable de los servicios jurídicos del club. Castro no ha querido hacer declaraciones a su entrada en la sede judicial y se ha limitado a dar los buenos días a los periodistas presentes.

Mientras, Del Nido Benavente lo hizo junto su hijo Miguel Ángel, el consejero del Sevilla Enrique de la Cerda y los letrados José Manuel García-Quílez y Ricardo Astorga, que participaron activamente en la última asamblea sevillista.De aceptar el juez la petición del exdirigente, el consejo de Castro, en pleno, quedaría cesado en el acto y se nombraría a un administrador judicial.

Si esto ocurriese, el siguiente paso sería convocar una junta extraordinaria por parte del administrador. Si el juez accede a ello, la asamblea sería también inmediata, antes del verano, pero siempre dentro de los plazos mínimos legales. En unos días quedaría fijado el orden del día de la junta, si bien luego tendrían que transcurrir los dos meses que marca la ley para celebrarla, salvo que, eso sí, el juez dispusiera un plazo inferior. La asamblea, por tanto, apuntaría a mayo o bien a junio con LaLiga recién terminada. El grupo de Del Nido entiende que su vuelta al poder es sólo cuestión de tiempo, argumentando que en las sociedades de capital hay una máxima: manda el capital, algo que en la última junta el abogado ya defendió tener controlado a tenor de los resultados de las votaciones. A este respecto, cabe reseñar que un posible recurso posterior solicitado por el grupo del presidente no paralizaría el cumplimiento de la resolución dictada, desde el mismo momento en que se notifique a los afectados.

Del Nido presentó la demanda de impugnación hace ahora dos semanas, una vez que sus abogados tuvieron ya en su poder el acta notarial de la pasada junta de accionistas celebrada el 29 de diciembre. El acuerdo impugnado es el punto 10 del orden del día de la asamblea, relativo al cese del consejo de administración. Punto en el que no pudo ejercer su derecho a voto por el pacto de gobernabilidad vigente, el cual impide que Del Nido pueda votar en contra del actual consejo de administración.

Por tanto, viernes de arenas movedizas para el futuro inmediato del Sevilla. La defensa del grupo de Castro defenderá de nuevo la vigencia del pacto de estabilidad firmado en 2019 por el propio Del Nido Benavente y el resto de los grandes accionistas del Sevilla FC, en el que todos se comprometían a unificar durante diez años el sentido de su voto en las asambleas de la entidad. De no conseguir convencer al juez, el club abrirá una nueva etapa con profundos cambios en su dirección y estructura organizativa de forma inmediata. Todo esto, en plena vorágine deportiva con el equipo luchando por no caer en puestos de descenso.

Una situación convulsa que arrastra el Sevilla en el plano institucional desde hace varios años y que ha visto como la inestabilidad se ha ido acrecentando en los últimos con las diferentes acciones de Del Nido contra la actual presidencia del Sevilla. El expresidente ha aprovechado la percha de la mala situación deportiva del equipo para exponer sus argumentos en un tour particular por medios de comunicación y peñas sevillistas. Lo cierto es que la actual directiva del Sevilla salió herida de la última junta de accionistas al no poder aprobar las cuentas del ejercicio 2021-2022 ni tampoco la gestión, por lo que al término de la asamblea José María del Nido proclamó que «el consejo está cesado técnicamente» y anunció sus movimientos, que hoy obtendrán respuesta en los juzgados.