La selección catalana ya no motiva

A pocas horas del encuentro, las expectativas de asistencia no son muy halagüeñas. Según informa la Federación Catalana, organizadora del partido, se han distribuído cerca de 20.000 localidades -no habla de venta-. Con las entradas que se regalarán antes del encuentro se podría arrojar un balance final de unos 25.ooo espectadores, incluso por debajo de la mitad del aforo del Estadio Olímpico.

Incluso en la Federación Catalana admiten que la cifra no es la deseada. No acompaña ni la fecha, ni el rival ni siquiera la temperatura. Tampoco ayuda a que las principales estrellas catalanas vayan a perderse el partido por uno u otro motivo. No estarán Xavi, Cesc o Piqué , baja de última hora a causa de una psuedociática.

Ya el año pasado, cuando se logró traer a la Argentina de Higuaín, Di María o Pastore, el batacazo fue monumental. Se esperaba un ambiente de gala en el Camp Nou, y a la hora de la verdad, sólo se vendieron 35.000 localidades. La Federación Catalana aún arrastra la deuda provocada por ese partido.

Ni las arengas de Cruyff a los aficionados, asegurando que sería una "vergüenza" ver Montjuic medio vacío, ni la presencia en el palco del nuevo presidente de la Generalitat, Artur Mas, parecen haber motivado al aficionado catalán, cansado de este modelo de partido intrascendente y metido con calzador.