Luis Enrique, estado zen para un 2021 sin tregua

En cualquier caso, bien haría la afición en encontrar un punto intermedio, pues España tuvo antes noches más bien ásperas, noches que desencantaban a cualquiera. Sin embargo, quien siempre ha creído a ciegas en este equipo es Luis Enrique, qué menos, y desde su aparente estado zen se plantea un 2021 repleto de tareas. «Más allá de los resultados, las sensaciones que me ha dejado el equipo y la selección en estos tres meses intensos fueron buenas, muy buenas diría», comenta el asturiano en los medios de la Federación. En el año que está a punto de empezar hay, si la pandemia no lo impide, una Eurocopa y está también la final a cuatro de la Liga de las Naciones, dos retos para colocar a España en su sitio .

Del 11 de junio al 11 de julio, se disputa por varias ciudades la Eurocopa que no fue. Llega un verano tarde y, según cómo, puede ser una ventaja para una España a medio hacer. Suecia, Polonia y Eslovaquia son los rivales del combinado nacional, y en cualquier otro tiempo se diría que la fase de grupos sería poco más que un trámite.

El problema es que esta España, la misma que golea 6-0 a Alemania, también pierde contra Ucrania o sufre contra Suiza , un ejemplo de cómo está el fútbol de ahora. Sostiene Luis Enrique, y puede que en eso no le falte razón, que sus chicos compiten siempre, pero también es cierto que ya no imponen tanto. En cualquier caso, el 6-0 contra Alemania puede marcar el camino y agitar el orgullo de ese vestuario. «Reafirma –ese resultado– la mentalidad del jugador porque el jugador se va creyendo lo que le vas diciendo en la medida en que va consiguiendo resultados y esto creo que puede ser un gran refuerzo para el equipo», comenta Luis Enrique, convencido de que se está en condiciones de afrontar un gran torneo.

«Sabemos lo que significa y queremos quitarnos el mal sabor de los últimos grandes eventos. Nuestro objetivo es volver a estar en disposición de ganar títulos. Y para eso hay que ser valientes, osados y hay que ir a por todas desde el principio; y eso es lo que vamos a intentar».

En octubre, y ya con la fase de clasificación para el Mundial de 2022 en marcha, España se centrará en la Liga de las Naciones. Juega las semifinales contra Italia, país anfitrión, mientras que el otro duelo enfrenta a Bélgica y a Francia.

Hay quien considera que los continuos cambios de Luis Enrique, que no ha repetido jamás equipo y que ha utilizado a más de 50 futbolistas, no ayuda para establecer un bloque sólido, pero el entrenador ve ahí una virtud de la que se beneficia España. «Ahora mismo el grupo lo forman unos 35 jugadores en los que se engloba mucha gente joven con muy poca experiencia, pero también con veteranos que derrochan múltiples experiencias. Y creo que ese ‘mix’ nos puede ayudar. Quizá no seamos una selección que se identifique con un once tipo, pero esto que para algunos es un problema, para mí no lo es», defiende el asturiano. La defensa es la línea más fija que tiene (Carvajal o Navas, Ramos, Pau Torres y Gayà ahora mismo serían los titulares).

Sin que nadie contara con ello, Unai Simón fue el titular en los últimos partidos de España. El portero del Athletic parecía ser la tercera opción, siendo la titularidad cosa de De Gea o Kepa , pero ninguno de los dos acaba de imponerse en la selección. El técnico siempre habla maravillas de sus porteros y esquiva el debate, pero fue precisamente él quien lo alimentó al darle la alternativa a Unai Simón. De la portería, pase lo que pase, siempre se hablará en esta España.

Como se hablará del mal endémico del gol, que existe por mucho que Alemania se llevara seis. No vale quedarse solo con ese partido, pues hincha demasiado una estadística inquietante. Por mucho que España juegue bien, sin acierto no se va a ninguna parte y sigue sin quedar claro quiénes son los delanteros de España. Ahora mismo, Morata sería el ariete más en forma , pero tampoco es fijo con la selección. Siempre ha gustado Rodrigo y asoman por ahí Gerard Moreno, Alcácer y compañía, para gustos los colores. «De 47 millones sólo hay uno y soy yo, algo bueno habré hecho», bromea Luis Enrique.