Torres se va de Europa en blanco

Una de las grandes virtudes del fútbol inglés es que no engaña a nadie. Siempre ofrece lo que se espera de él y esta vez tampoco defraudó en un Old Trafford a reventar. La ocasión lo merecía y, como si de un partido de la Premier se tratara, ambos equipos se mantuvieron fieles a su habitual cita con el juego directo, convirtiendo el encuentro en un duelo de ida y vuelta desde el arranque.

Obligado a buscar un gol que igualara la eliminatoria (0-1 en la ida), el conjunto londinense sembró la inquietud en las gradas, pero nunca metió miedo durante la primera mitad. Anelka y Torres, que volvió a ofrecer su peor versión y fue sustituido en el descanso , no recibieron balones francos, por lo que cayeron una y otra vez en las redes de Vidic y Ferdinand ante la desesperación de su técnico. El Manchester fue ganando terreno y obligó a dar un paso atrás a un rival que se llevó el primer gran susto al enviar Chicharito Hernández el balón al fondo de la portería cuando se encontraba en fuera de juego por centímetros. La jugada espoleó a la grada y comenzó un asedio que tuvo fruto a dos minutos del descanso con el mexicano otra vez como protagonista al rematar un excelente pase del incombustible Giggs.

Ancelotti cambió su pareja de ataque y el movimiento de piezas funcionó cuando su equipo jugaba con diez por expulsión de Ramíres. Pero la emoción por el gol de Drogba fue efímera porque un minuto después el coreano Park volvió a llevar el júbilo a Old Trafford. El Chelsea no se rindió, pero sus esfuerzos fueron inútiles.