Orgullo e indignación en España: «Con lo que tenemos, es de nuestros mejores torneos»

«Creo que proporcionalmente, con lo que tenemos y lo que hemos dado, es de nuestros mejores campeonatos. Estoy muy orgulloso de mis jugadores», reconocía el italiano desde el Indonesia Arena, bajo de ánimos tras un partido muy angustioso ante los norteamericanos, resuelto por detalles en el último cuarto. «Es admirable. A un equipo lleno de talento NBA le ha costado ganar a uno de jugadores. Estamos orgullosos de haber jugado con un base de 19 años. Chapeau para Juan. Que va a tener un gran futuro. Todo el mundo ha dado todo lo que tenía. Los grandes veteranos han todo lo que tenían, han mordido hasta el último gramo de polvo. Tengo poco que decir», sentenciaba el técnico con un discurso heroico pero realista.

En la rueda de prensa tampoco pasó desapercibido el hecho de que España tendrá que disputar el Preolímpico para estar en los Juegos de París del próximo verano, una realidad anómala pues, sus grandes resultados deportivos de los últimos años, le habían proporcionado el billete directo para la gran cita. «El Preolímpico va a ser durísimo, va a ser una gesta titánica clasificarse para los Juegos. Haremos las cuentas de quiénes están y quiénes no para ir a la guerra. Y si no lo ganamos, lo que tenemos que hacer es ir como hoy, con la cabeza alta», explicaba Scariolo.

La serenidad del seleccionador, en cambio, no se encontraba en los que estuvieron en la pista, muy frustrados por un partido en el que se vaciaron, donde rozaron la matrícula contra jugadores que son considerados astros al otro lado del Atlántico, pero que finalmente remató con el agrio sabor de la derrota.

Uno de los más acertados en el partido, el alero del Barcelona Álex Abrines, fue uno de los primeros en convertir en palabras toda esa negatividad pasajera. «Las sensaciones son ahora horribles. Por coger algo positivo, es que el equipo se ha dejado todo en la pista y lo hemos peleado hasta el final. No se si me multarán, pero el arbitraje ha sido lamentable. Son demasiado protagonistas y no puede ser. En un partido de este calibre, con dos equipos jugándoselo todo, los protagonistas somos nosotros, no ellos. No solo hoy, durante todo el torneo el arbitraje ha sido flojo», criticó el catalán.

Santi Aldama, que tras jugar solo siete minutos ante Letonia, se doctoró con un partido brillantísimo ante una de las grandes favoritas, también mostró una mezcla entre orgullo y decepción por el resultado. «Hemos tenido la opción de empatar en el último lanzamiento, pero no ha sido posible. El equipo está mal, pero me quedo con cómo hemos competido. Esto es deporte y es duro. Duele pero hemos hecho nuestro trabajo. Tenemos que estar orgullosos pese al dolor que sentimos ahora mismo», sentenció el canario.