España le monta una fiesta a Pau Gasol

Balón al aire. La posesión es de España y el primer ataque termina en las manos de Pau Gasol. Un bote. Dos. Y mirada furtiva al aro antes de lanzar y anotar los primeros puntos. Su manera de dar las gracias tras ser elegido abanderado. Hacer lo que mejor sabe. Lo que le ha llevado a lo más alto del mundo de la canasta y a encarnar el máximo honor para un deportista.

Esa canasta de Gasol fue la primera del festín que España se dio ante Argentina, el rival más complicado de todos a los que se había enfrentado hasta entonces, pero que resultó ser el más sencillo para los hombres de Sergio Scariolo. El inicio de la selección fue espectacular. Después de vérselas con Gran Bretaña, Australia o Túnez, el mero hecho de tener enfrente a una de las candidatas a las medallas hizo que España elevara su motivación para ofrecer una versión mejorada y muy cercana a la que deslumbró hace un año durante el Eurobasket de Lituania .

La primera mitad fue para enmarcar . Un vendaval de juego ofensivo liderado por Calderón (14 puntos al descanso) y un infalible Pau Gasol. Un festival al que se unieron todos, incluido un Juan Carlos Navarro cada vez más recuperado. La distancia tras el segundo cuarto era abismal (61-36), impensable antes de comenzar el partido. A ella habían contribuido nueve triples y una fortaleza defensiva que llegó a desquiciar a los argentinos.

La impotencia albiceleste se tradujo en un par de rifirrafes que tuvieron a Ibaka y Scola como protagonistas . El español se excedió ante las provocaciones y terminó en el banquillo. La tangana propició la remontada argentina , que llegó a ponerse a siete puntos (83-76) a falta de seis minutos para el final. La salida a cancha de Calderón devolvió la tranquilidad a la selección, que supo rehacerse para mantener la ventaja y lograr su séptima victoria de la gira de preparación. La última antes de medirse el martes a Estados Unidos.