España llega invicta a cuartos y se medirá a Montenegro

El equipo español no especuló con el resultado en ningún momento y salió a por la victoria desde el salto inicial, dominando de principio a fin a las altísimas jugadoras rusas.

España salió con la lección bien aprendida ante Rusia, con una defensa muy agresiva y con el punto de vista puesto en la estadounidense nacionalizada Epiphanny Prince . Las ventajas no se hicieron esperar, 7-2 (min.3) y 13-4 (min.6,30).

La velocidad en ataque y el rápido movimiento del balón penalizó la defensa rusa, con problemas de movilidad, sobre todo lateralmente, debido a la gran altura y corpulencia de sus pívots.

Al final del primer cuarto, el marcador reflejó un 17-9.

España ahondó en sus virtudes en el segundo acto, con brillantes transiciones ofensivas que penalizaban las dificultades de las rusas para correr hacia atrás en su balance defensivo.

El parcial de 9-0 con que se comenzó el cuarto, 26-9 (min.12,15) ofreció un gran colchón de seguridad a las jugadoras española, entre las que destacó el gran trabajo de Laura Nicholls, con 8 puntos y 6 rebotes, y de Alba Torrens, 8 puntos y 5 asistencias.

Anatoliy Myshkin , entrenador de las rusas y figura mítica del baloncesto soviético, no encontró la manera de frenar las acometidas de las españolas y sólo a base de jugar con sus enormes pívots, después de jugadas muy elaboradas, conseguían hacer daño en el aro español.

María Vadeeva, jugadora de 1,90 metros y sólo 16 años, fue la más destacada, con 6 puntos, hasta el 38-21 con el que se llegó al descanso.

Rusia salió después con la clara misión de frenar las transiciones españolas, pero de inicio el marcador alcanzó la máxima ventaja para España, 42-21 (min.22,45), hasta que las rusas ajustaron su defensa y comenzaron a jugar con sus torres en ataque.

El equipo ruso hizo varios intentos de acortar distancia, pero las españolas, lejos de especular con el marcador, siguieron atacando el aro con decisión y defendiendo con garra y con una defensa en zona que se ajustaba a individual cuando las pívots rivales caían a la línea de fondo. Aún así, Rusía ganó el parcial del tercer acto por 14-16, para un 52-37 global.

Myshkin, en vista de que sus titulares no conseguían hacer mella en el marcador, 60-43 (min.33), decidió dejar la calidad en el banquillo y sacar a las suplentes. La medida dio resultado a medias. Rusia se acercó en el marcador, aprovechando que España bajó un poco las revoluciones de su juego hasta llegar al 66-57 final.

España llega invicta a cuartos de final y se enfrentará a Montenegro el próximo jueves 25 de junio