El Betis Baloncesto mide su puesta a punto en Logroño

Por una diferencia mucho más ajustada cedió el Betis Baloncesto (77-81), que se fue del partido por sus grietas defensivas en el segundo cuarto, se recompuso en el tercero remontando quince puntos y dio la impresión de pagar en el último todo el esfuerzo realizado para repetir los pecados de la primera parte y darse de bruces, para más inri, con una serie de controvertidas decisiones arbitrales que cayeron a favor del conjunto visitante.

El Leyma Coruña pareció, en cualquier caso, un equipo más compacto que el Betis, cuya planificación se ha ultimado en los últimos quince días antes de la apertura de la campaña. A contrarreloj. El equipo al completo, con todos los fichajes, ha jugado un partido, y amistoso. Es lógico que aún tenga que ajustarse en defensa, asimilar los sistemas y los jugadores, conocerse entre sí. Porque sólo del conocimiento diario surgen las complicidades en la pista, eso que ahora se llama automatismos. En Logroño lo espera el Rioverde Clavijo, que la pasada campaña militaba en la LEB Plata y este verano, ante la renuncia del CB Prat para jugar en la LEB Oro, vio las puertas abiertas para regresar a la segunda categoría del baloncesto español. Dirigido por Jenaro Díaz, fue el tercer rival de los verdiblancos en pretemporada. Se impuso entonces el Betis por dos puntos (65-67) con un equipo al que aún le faltaban dos piezas: Joaquín Rodríguez e Ismael Romero.

En ese encuentro, el segundo máximo encestador albiverde fue Krutwig, cuya carta de presentación ante el Leyma Coruña en San Pablo se saldó con una tarjeta de doce puntos y cuatro rebotes. Parece que podría adaptarse a la LEB Oro, donde es un debutante. Igual que les ocurre a muchos de sus compañeros. No hay muchas horas de vuelo acreditadas en la categoría y esa carencia se notó en el primer partido. Incluso a nivel arbitral. Porque el respeto hay que ganárselo a todos los niveles y no hay mejor forma que siendo competitivo y sumando victorias.

Contra el Leyma sobraron fisuras en defensa, pero a la vuelta de vestuarios tiraron los jugadores de compromiso defensivo. En el tercer parcial comprendieron que en esta LEB Oro no se gana metiendo una canasta de más sino con una menos de sus rivales. Hay que bajar el centro de gravedad, acudir a la ayuda del compañero sobrepasado y pelear como fieras el rebote. Esto es el baloncesto español, y aun tratándose del segundo nivel, en nada desmerece, sino todo lo contrario, a las ligas de las que provienen algunos de los nuevos integrantes del vestuario. El nivel técnico y físico es mayor. Transmitir esto les corresponde a hombres como Almazán o Rakocevic.

Respecto al revés con el Leyma, el Betis tiene que crecer en defensa y en eficacia de su tiro exterior, que fue una vía de agua importante al convertir sólo 7 de sus 31 intentos. Especialmente negados estuvieron Pacheco, Djedovic y Almazán. Y el Betis, con las dos amenazas que tiene dentro, sobre todo Ismael Romero, necesita abrir el campo con el triple para dar rienda suelta a la potencia física del caribeño.

En el Clavijo, muy desdibujado en Alicante (caía de 28 al descanso), destacan el base Cabrera, los escoltas Knudsen y Coffi, y los aleros Treviño y Norris, amén de los pívots Nicolau y Bafutto. Con los riojanos juega también Kevin Torres, hermano del exverdiblanco Mike Torres. El Betis, de nuevo con la baja de Joaquín Rodríguez por carecer del pasaporte comunitario, es un equipo en formación. Algo lógico a tenor de cómo ha sido el verano, con dos planificaciones en una y cambio de propietario incluido.

El grupo Xoy anunció esta semana la campaña de abonos, ya activada, y la respuesta está siendo satisfactoria en estos primeros días. Contra el Movistar Estudiantes, el viernes 20 de octubre en San Pablo, se comprobará qué acogida ha tenido entre los aficionados verdiblancos. Ese capítulo, el tercero de la temporada, ya llegará.

Hoy toca centrarse en el segundo. En la visita a un recién ascendido herido cuyo objetivo es la permanencia en esta LEB Oro que al Betis le gustaría perder de vista cuanto antes. Quiere ascender, pero las posibilidades de su plantilla se desconocen. No se sabe qué dará de sí. Hay que verla más. No parece, por todo lo comentado, la mejor temporada para que la paciencia brille por su ausencia. El proyecto apenas está arrancando y el deseo es que con toneladas de ilusión y trabajo adquiera pronto velocidad de crucero.

Rioverde Clavijo: Cabrera (1,87, 10); Coffi (1,93, 7); Norris (2,03, 23); Treviño (2,02, 55); Nicolau (2,08, 12) -posible quinteto inicial-; Moreno (1,90, 1); Miguel de Pablo (1,86, 5); Barbosa (2,00, 9); Tamba (2,01, 14); Kevin Torres (1,88, 33); Knudsen (1,90, 77); Bafutto (2,08, 99).

Real Betis Baloncesto: Rogic (1,88, 19); Pacheco (1,90, 23); Djedovic (2,03, 16); Domènech (2,08, 12); Krutwig (2,06, 25) -posible quinteto inicial-; Pablo Marín (1,90, 6); Almazán (2,00, 10); Rakocevic (1,92, 22); Romero (2,03, 28); Kuksiks (2,00, 33); Fevry (1,92, 93).

Árbitros: Muñoz García, Marqueta Gracia y Acevedo Perera.

Hora y TV: 12.00. En directo por la app LaLiga Plus (contenido premium, de pago).