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el mentidero

El gran dictado separatista

Ya tardaba el eurodiputado Ramon Tremosa en comparar a «Madrid» con Putin. Que es lo mismo que comparar a Crimea con el Valle de Aran, que se quiere autodeterminar

maría jesús cañizares

«Life’s a celebration», decía la canción. Y Félix Millet, expoliador confeso del Palau de la Música, así lo cree, como demuestra la mariscada que se zampó tras sentarse en el banquillo por el pelotazo del hotel anexo al Palau de la Música. Me ... viene bien el símil deportivo, ligado para siempre jamás con la corrupción urbanística, para recordar otro tipo de desfalco, en este caso futbolístico, el que supuestamente se cometió con el fichaje de Neymar y que obligó a Sandro Rosell a dimitir como presidente del FC Barcelona. El mismo día en que anunció su retirada, Rosell se tomó un gin-tonic en la terraza del remozado Sandor de la plaza Francesc Macià de Barcelona. Sin duda, la vida es una celebración. Para unos más que otros, sobre todo si se pertenece a la casta social de Millet y Rosell, que no son pareja pero sí residentes en Pijolandia. A quien le ha salido un ramalazo pijo, sin serlo, es a la simpática escritora Empar Moliner, rostro habitual de TV3, quien el sábado participó en el concurso «El gran dictat» y prometió destinar el premio a la independentista Asamblea Nacional Catalana (ANC) de Sant Cugat, la muy acomodada ciudad del Vallès. La selectiva solidaridad de Moliner, muy propia de determinados activistas del secesionismo, no prosperó y el premio fue a parar a una ONG mencionada por el ganador.

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