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La discusión por un sillón acaba con la muerte de un anciano a garrotazos

La agresión de José a Félix se produjo en la residencia municipal de mayores

La discusión por un sillón acaba con la muerte de un anciano a garrotazos anan pérez herrera

manuel moreno

Este año Félix Martín Aguado había superado dos infartos, un encharcamiento de pulmones y acababa de dejar atrás una gripe que lo había dejado todavía más débil. Pero e ste anciano de 80 años no pudo rehacerse ayer de las graves heridas que José, de 86 años, le había provocado horas antes con un bastón, tras discutir los dos por ocupar un sillón en la residencia municipal de mayores de Argés, donde ambos estaban internos.

Félix murió a las 6.10 horas en el hospital Virgen de la Salud de Toledo, donde ingresó el martes por la noche, después de que José le rompiera su bastón encima. La agresión se produjo sobre 19.00 horas en una sala de la residencia «Santa María de la Antigua» , situada en la urbanización Los Olivos. Según la versión de la familia del difunto, José pidió a Félix que le dejara sentarse en el sillón que estaba ocupando. Pero Félix se negó y José le hirió levemente en la cara.

Félix fue atendido en la enfermería de la residencia y regresó a la sala. Sin embargo, José la emprendió a garrotazos contra Félix en un pasillo y llegó a romper su bastón encima de la víctima cuando ésta se encontraba en el suelo. Con dos brechas en la cabeza —de siete y tres centímetros de longitud cada una—, Félix fue evacuado al hospital Virgen de la Salud.

Se conoce la versión de la familia por el testimonio que han recogido de una interna, pero ni la dirección de la residencia ni el Ayuntamiento de Argés explicaron ayer qué había ocurrido. La Delegación del Gobierno en Castilla-La Mancha confirmó que la utilización del sillón fue el detonante de la agresión a garrotazos.

La familia de Félix estudia «llegar hasta donde haga falta» para que el agresor no sea admitido en ninguna residencia, según explicó ayer Laura Martín, hija del fallecido. Laura tiene conocimiento de que el agresor de su padre insultaba con frecuencia a otros internos, pero nunca había llegado a las manos con otros residentes. « Nos han dicho que era agresivo y que se la tenía jurada a otro anciano con el que compartía habitación », según Laura.

Al agresor, detenido, la Guardia Civil le imputa un delito de homicidio pero se desconoce si será trasladado a otro centro. Hace dos años, la mujer que mató a mordiscos a Petronila Díaz Sánchez, una anciana de 86 años que murió en su habitación de la Residencia Social «San José» de Toledo en diciembre de 2010, fue recluida en una residencia de mayores de Bargas que cuenta con una unidad para este tipo de casos.

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