Twitter da el timón a Jack Dorsey

Además de este cargo, el que fuera fundador de la red del pajarito azul se mantendrá como máximo responsable de Square, firma de pagos móviles. Su elección no es exactamente una sorpresa. La red de «microblog», por fin, ha hecho oficial este nombramiento este lunes . Accionistas habían pedido abiertamente que se perpetuarse en el cargo y la prensa especializada comenzó la semana pasada a hacerse eco de los rumores . Adam Bain , de 42 años, será el jefe de operaciones.

También continuará como miembro de la junta directiva de Twitter, aunque dejará de ser presidente. Entre sus retos se encuentra tirar el lastre de la ausencia de un crecimiento notable que le ha impedido a la compañía aumentar su número de usuarios con determinación. En los últimos años ha visto cómo otras redes especializadas como Instagram le pasaban rápidamente.

Ahí es donde ha apuntado directamente en sus primeras palabras tras ser nombrado consejero delegado. Como no podía ser de otra manera, las ha realizado a través de su perfil de Twitter . «Nuestro trabajo a partir de ahora es hacer Twitter fácil de entender por cualquier persona en el mundo y dar más utilidad a las personas que quieren usarla todos los días». A su juicio, Twitter es la «herramienta de comunicación más poderosa que existe en nuestra generación» dado que «muestra todo lo que el mundo habla 10-15 minutos antes que los demás».

La historia de la red de los 140 caracteres está plagada de rencillas personales, aspectos controvertidos y conflictos. En 2006, cuando Dorsey trabajaba en una compañía informática en quiebra, su compañero Evan Willians le pidió ayuda para salir adelante. El concepto de una plataforma directa pensada para contar abiertamente dónde y qué hacemos se convirtió en el embrión de Twitter.

Pocos años después se impulsó su atractivo hasta dar, en 2013, su salto a bolsa, acompañado de un sinfín de celebridades que se sumaron a la causa. Actualmente, cuenta con 316 millones de usuarios activos, pero la curva de crecimiento se ha ralentizado y las dudas sobre su futuro se han incrementado conforme las pérdidas aumentaban.