Coca-Cola emite un anuncio para combatir la obesidad por primera vez en su historia

El spot, que cuenta con una duración de dos minutos, se emitirá en horario de máxima audiencia en todos los espacios publicitarios de los principales canales de noticias por cable estadounidenses. Así, la franja seleccionada (la nocturna) garantizará su visionado por parte de millones de norteamericanos.

El anuncio, que ha sido bautizado con el título «Coming Together», respalda las medidas que la compañía de bebidas ha puesto en marcha para combatir el sobrepeso. Entre ellas, se destacan el ser más transparente sobre el contenido calórico de sus refrescos y la expansión de su línea de bebidas bajas en calorías.

Además, Coca-Cola ha decidido recordar también en el video que «todas las calorías cuentan» para mantenerse en línea, «incluyendo las de los productos de Coca-Cola y las de todos los demás alimentos y bebidas». A su vez, la empresa considera que puede «jugar un papel muy importante» en esta lucha.

El de esta noche será el primer spot de Coca-Cola relacionado con la obesidad, pero no será el último, pues la multinacional emitirá un segundo anuncio a partir del miércoles en el que se hará hincapié en que las latas de Coca-Cola dejan claro que incluyen 140 calorías y en el que se anima a la gente a «pasarlo bien quemando esas calorías».

«Esto tiene que ver con la salud y felicidad de todo aquel que compra nuestros productos y quiere bebidas con unos sabores increíbles, capacidad de decidir e información», ha explicado el director de la división de bebidas gaseosas de Coca-Cola Norteamérica, Stuart Kronauge, en un comunicado.

El anuncio llega cuatro meses después de que las autoridades sanitarias de la ciudad de Nueva York dieran luz verde a la polémica prohibición de los refrescos azucarados en envases superiores a 16 onzas (0,464 litros), una medida que entrará en vigor en marzo y que puso en pie de guerra a las grandes compañías de refrescos de EEUU.

Un mes después de que Nueva York aprobase esa legislación, Coca-Cola, PepsiCo y otros grandes fabricantes de refrescos accedieron a informar del contenido calórico de sus bebidas en las máquinas expendedoras en algunas ciudades de EEUU.