Cristiano Ronaldo, gran favorito para ganar el Balón de Oro

El favoritismo del luso viene delimitado por varios factores. El primero, que su gran rival de otros años, Lionel Messi, se ha quedado esta temporada muy lejos de sus cifras habituales y muy lejos de las que el jugador portugués ha puesto sobre la mesa de Zúrich. Ni un solo título y en su haber personal solo conseguir el de mejor jugador del Mundial, algo que, lejos de potenciar su prestigio, lo mermó dada la ridiculez de la elección. El segundo es que el otro finalista, también merecedor del galardón por su gran temporada, es Manuel Neuer, portero. Y ese es su gran impedimento: que es portero.

Desde que Yashine ganó este galardón en 1963, ningún guardameta ha podido levantar el Balón de Oro. Eso sí, los alemanes apuestan por su portero, que solo recibió cuatro goles en el Mundial de Brasil y demostró ser un futbolista de categoría excepcional, no solo bajo los palos sino saliendo a jugar con los pies fuera del área hasta parecer un jugador de campo más.

A favor de Neuer está el haber ganado el Mundial con Alemania (venciendo a la Argentina de Messi en la final), pero no solo eso se puede decir en favor del arquero germano. También logró la Bundesliga y la Copa alemana con Pep Guardiola. Además, Neuer fue catalogado como el Guante de Oro y Jugador del Año en la liga alemana. Por otro lado, las estadísticas aseguran que Neuer fue más que esencial, tanto para su equipo como para la selección alemana, pues de los 64 partidos que jugó en 2014, tanto en Copa, Champions, Liga, amistosos y Mundial, logró 47 victorias; es decir, el 73.43 por ciento de los puntos disputados.

A pesar de ser buenas cifras, se quedan cortas al lado de las de Cristiano Ronaldo, que ha completado un año formidable. Aparte de llegar a Zúrich con un zurrón repleto de goles, el portugués aporta su formidable mochila de títulos: cuatro, entre ellos uno de los más importantes: la Champions. Además, Copa del Rey, Supercopa Europea y el Mundialito. En las apuestas, Cristiano es favorito de forma abrumadora pues en las casas de apuestas un 90 por ciento le ven con el trofeo en sus manos. Que gane Neuer se paga a 5,5 y Messi se paga a 11 euros, muy lejos de sus rivales de hoy.

Como suele ser habitual, las posibilidades de unos y otros se miden en la afluencia de gente que asistirá según del club de que se trate. Por ejemplo, en el Barça Bartomeu no va a asistir (ha roto relaciones con la FIFA) mientras que en el Madrid se ha movilizado medio club: irán Florentino Pérez, Ancelotti (nominado a mejor técnico), Butragueño, Cristiano, Sergio Ramos, James y Kroos (estos últimos incluidos en el mejor equipo europeo). Además acudirá una expedición de prensa del club más familiares y amigos de los jugadores.

Se dice con frecuencia que en la votación del Balón de Oro se tiene muy en cuenta las últimas semanas anteriores a la consecución del evento. En este aspecto, Cristiano lleva una muy mala racha en los últimos encuentros. Sin embargo, este es un dato que no va a influir en la votación ya que esta se cerró en noviembre, mucho antes de que el jugador portugués empezase su mala racha ante el gol, racha que data del 12 de diciembre. Desde entonces el delantero del Madrid no ha marcado un gol de jugada e incluso el sábado, ante el Español, rompió su larga racha de marcar siempre en un partido jugado en el Santiago Bernabéu (15 meses consiguiendo algún tanto).

Este año no ha habido prórroga en la votación (sí lo hubo en el anterior), por lo que para ese instante negativo del portugués ha quedado fuera de la retina de los votantes. Por otra parte, no todo ha sido malo para Cristiano en estos últimos encuentros. Aunque no ha marcado, su juego global ha sido bueno. Incluso ha aumentado sus cifras como asistente, hasta el punto de que se ha convertido en el jugador con más asistencias de la Liga (12 tantos conseguidos a pases suyos).

De cualquier forma, se habla de una mala racha de Cristiano porque lleva cinco partidos sin marcar (lo hizo ante el Milán, pero era un amistoso). Lo que para otros es normal, para él es una tragedia. De ahí su grandeza.