La izquierda francesa ya dispara contra Manuel Valls
El nuevo primer ministro es ya el objeto de los ataques de comunistas y ecologistas e incluso despierta voces críticas en el propio Partido Socialista
Izquierda socialista, comunistas, extrema izquierda y ecologistas tiran con mira telescópica contra Manuel Valls, jefe de Gobierno, que intenta “asociar” a su política a todas las familias de una izquierda balcanizada con proyectos políticos enfrentados.
Mientras Valls se reunía con varios líderes ecologistas, con el fin de “venderles” el programa de Gobierno que presentará este martes, ante la Asamblea Nacional, Eva Joly, personalidad histórica del ecologismo francés, declaraba: “Valls es un hombre interesante y guapo. Sus modelos son Gerhard Schroeder y Tony Blair . El primero es un defensor de Putin. El segundo gestiona su fortuna en varios paraísos fiscales”.
Mientras Valls recibía a representantes del PCF y del Frente de Izquierdas (FdI), intentando “asociarlos” a su política, Jean-Luc Mélenchon, líder del FdI, declaraba: “Valls no merece que los diputados voten su confianza”. Advertencia “apocalíptica”, quizá irreal, pero muy elocuente. Dentro del PS, medio centenar de diputados de izquierda han publicado un texto común “advirtiendo” a Valls y a Hollande, en otra medida, contra una política que ellos consideran “demasiado liberal”. En esa misma línea, Claude Bartolone, presidente de la Asamblea Nacional, declara al vespertino Le Monde: “Francia no debe sacrificarse a la Europa liberal”.
Manuel Valls puede contar con una gran mayoría de diputados socialistas y de radicales de izquierda, para aprobar su programa de gobierno, este martes. El centro y la derecha votarán contra, masivamente. Tras el voto de castigo de las recientes elecciones municipales, los diputados socialistas se lo pensarán muy mucho, antes de “castigar” a Valls con severidad.Sin embargo, las resistencias y advertencias contra Valls vuelven a recordar la división y balcanización de las izquierdas francesas, en varios terrenos capitales.
El presidente Hollande ha nombrado a Valls con el fin de intentar cumplir los compromisos del Pacto fiscal europeo (recorte del déficit y la deuda). Pero una parte importante de la mayoría parlamentaria socialista es muy hostil a esa disciplina europea. Hollande lleva meses anunciando que Francia debe consumar de 50.000 a 65.000 millones de economías (recortes). La izquierda socialista amenaza con vender al precio más alto su renuente apoyo a unos compromisos europeos que Francia lleva veinte años sin cumplir.
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