Anthony Vaccarello llegó para llenar el vacío que dejó el diseñador Christophe Decarnin en Balmain. Cuando Decarnin se retiró del mundo de la moda, le remplazó en esa Casa un joven Olivier Rousteing. Pero el que tomó el relevo de la moda sexy rockera no ... fue Rousteing, sino Vaccarello, en su propia firma.
La más lista ha sido Donatella Versace, que se dio cuenta a tiempo y pudo fichar al joven Vaccarello (seguramente con condiciones económicas razonables, que se hubiesen disparado de esperar alguna temporada más) para hacer una colaboración con su firma Versus.
Las colecciones de Vaccarello se caracterizan por el uso del cuero (tanto en invierno como en verano), la abundancia de minivestidos arriesgados, el abuso del color negro y la silueta «slim fit». ¿Entre sus grandes fans? Todas las modelos… ya que son de las pocas que pueden lucir su ropa (lo decimos desde la envidia total). Desde su musa, Anya Rubik (Vaccarello es el responsable de lanzar su cadera al estrellato) hasta la misma Gisèle Bündchen. Las demás tendremos que apuntarnos a un gimnasio para poder enfundarnos en sus creaciones.
Este martes presentaba en París su colección para la primavera-verano 2015, y valiéndose de su picardía de siempre, creó minifadas de cuero asimétricas (la asimetría llega casi hasta la ingle), y blusas abiertas (los escotes que llegan rozando el ombligo). También hubo referencias al mundo náutico, introdujo un nuevo material, el «denim» (tela vaquera) y se atreve con estampados. Pero lo más significativo es su primer intento de crear marca (ya era hora y se lo puede permitir). Lo delata su sudadera con su nombre (su marca) en capitulares.
Por qué debes saber quién es Anthony Vaccarello
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