Los candidatos a liderar el PSOE piden a los militantes que participen

En un momento en que los «aparatos» del partido, tanto el federal como los regionales, han mostrado su miedo a que haya una baja participación -pocos creen que supere el 50 por ciento- por ser un domingo de verano , los tres aspirantes piden el voto para ellos pero, sobre todo, hacen un llamamiento a acudir a votar.

Madina subraya que es la primera vez en 130 años de historia en la que los militantes socialistas «podrán cambiar las cosas» y recuerda que está en su haber que eso haya sido posible; José Antonio Pérez Tapias pide el voto en las cuatro lenguas oficiales del Estado y Pedro Sánchez homenajea a los militantes con su vídeo : «Gente con casta».

«Me afilié a los 17 años para intentar cambiar las cosas y, veinte años después, sigo queriendo cambiarlas, pero solo podré hacerlo con tu ayuda, con tu fuerza», dice Madina en su misiva. Hay que «llenar las urnas y a demostrar que este partido está más vivo que nunca».

Por su parte, Pedro Sánchez se presenta para combatir la idea que lanza Madina de que es un candidato de los «aparatos» regionales que controla Susana Díaz en la sombra, como un aspirante «sin condiciones, sin deudas y sin ataduras».

«Debemos construir nuestra política sobre la democracia radical y la honradez plena, sacudíendonos los complejos para renovar y reivindicar el Estado de Bienestar», añade Sánchez. «Creo que el diálogo consiste en empujar, no en ser empujado», dice, y añade que le merece «el mismo respeto» el voto de cualquier militante, sea de Andalucía o de otra región.

El tercer candidato en liza, José Antonio Pérez Tapias, estima que hay que cambiar «lo que no no funciona bien» en el PSOE, para que sea «transparente, libre, plural y participativo» y no haya «redes clientelares».

«Quiero que el PSOE vuelva a ser la organización de los trabajadores y trabajadoras para la defensa de sus derechos», manifestado en su carta, en la que pide el voto a los militantes en castellano, gallego, euskera y catalán.

Tapias anima también a «recuperar el entusiasmo, las ganas de seguir luchando y la pasión por la justicia que ha de inspirar una acción política transformadora limpia, transparente y eficaz». La pasión de «sentirnos socialistas, de izquierdas, radicalmente democráticos», señala.