Atlético-Real Madrid: un derbi en cuartos de final de la Liga de Campeones

Salió la bola del Atlético de Madrid y en el ambiente empezó a sobrevolar el fantasma de la revancha. Era ya imposible que su rival fueran el Barcelona o el PSG, que poco antes habían conformado ya la primera eliminatoria de cuartos de final, así que las opciones de que el nombre del Real Madrid estuviera escondido en la bola sujetada por el mítico Riedle eran mayores.

El exjugador del Borussia Dortmund, campeón de la Champions en 1997, tardó en desenroscar la bola. Atascado, tardó en mostrar el papel que servía un derbi para cuartos de final. El enésimo enfrentamiento entre Atlético y Real Madrid esta temporada que, hasta el momento, tiene claro color rojiblanco.

La ida se disputará en el Calderón, al igual que ocurrió en la Copa del Rey, y la vuelta, una semana después, será en el Bernabéu. Para entonces, aún queda un mes (la ida será el 14 de abril y la vuelta el 22 de ese mes) en el que pueden pasar muchas cosas. Ninguno cuenta con grandes bajas ni jugadores sancionados, pero el factor psicológico ya está en marcha. Las derrotas blancas pesan (y mucho) en el ambiente, mientras que los rojiblancos aún recuerdan el gol de Ramos y lo que sucedió después en Lisboa. Es un mes veremos si hay revancha o el Madrid sigue dominando a sus vecinos en Europa.

Dentro de lo que había en el bombo, el Barcelona puede decir que ha tenido algo de fortuna. Por nombre, el PSG era uno de los equipos más complicados , pero si tenemos en cuenta que Laurent Blanc no podrá contar con Ibrahimovic ni Verrati en la ida (ambos sancionados después del partido ante el Chelsea ), el nivel de exigencia de los azulgranas baja mucho.

Uno de los principales problemas de Luis Enrique será lidiar esta eliminatoria con la liga, ya que el Barcelona se enfrentará con el Sevilla y el Valencia justo antes de afrontar los partidos ante el PSG (la ida será el 15 de abril y la vuelta el 21 de ese mismo mes). Dos semanas de máxima exigencia que el técnico deberá afrontar con alguno de sus hombres lesionado.

Los dos equipos más benefiados del sorteo fueron el Bayern y la Juventus. Los alemanes jugará con el Oporto, quizá el equipo más débil en cuartos de final, en una eliminatoria que se decidirá en el Allianz Arena.

La Juventus , que se deshizo del Dortmund en octavos, recibirá en la ida de cuartos al Mónaco , la sorpresa de esta ronda al haber eliminado en la anterior ronda al Arsenal de Wenger.