España se maquilla el rostro ante Chile

Además, Chile no es Finlandia, sino mucho más. Ya lo vimos en el Mundial, que casi nos saca los colores. Esta vez nos puso las pilas con más intensidad, rapidez, gancho y garra en cada jugada . Por otro lado, es un equipo con mucha calidad en sus botas y cuando robaba el balón gracias a su presión continua, lo jugaba con precisión y cierto gracejo. Sumen a eso la dinamita que arriba le ponía un excelente Vargas y verán que ahí tuvo España un rival de mucho cuidado. [Así narramos el partido]

No es que los de Del Bosque salieran a tocarse el ombligo, pero en esa pizca de poner una marchita menos dejó que los chilenos se les subiesen a las barbas. Prueba de que España no se durmió totalmente fue que tras el gol fueron arriba, tocaron, dominaron el partido y encerraron a Chile . Ahí se notó el nivel porque empató Soldado en un certero cabezazo a mejor centro de Pedro y luego Cesc envió un centro-chut extraño al larguero.

En esos minutos en los que Chile no presionó tanto, la campeona campó a sus anchas, dio la sensación de poder quebrar el partido y ofreció mucho mejor cara. Pero sucede que en estos amistosos nunca se sostiene el mismo nivel de intensidad. En esos toboganes de ida y vuelta en la concentración, Vargas volvió a hacérselo a la defensa española, esta vez a Albiol que, hasta entonces había sido el mejor, y volvió a decantar el luminoso

Incógnitas en el aire

En general había existido bastante equilibrio pero, visto globalmente el periodo, Chile había puesto algo más: más salsa, ganas, concentración, un poco más de todo, estando siempre muy metida en el partido, con más hambre de gloria que los de Del Bosque , quizás algo relajados después del valioso triunfo en Finlandia que les deja a las puertas mismas del Mundial de Brasil.

Al descanso flotaba una duda en el aire: saber si Chile iba a aguantar ese ritmo demoledor, con un desgaste físico tremendo en la presión que fue la clave para nivelar el mayor talento de la campeona del mundo. No obstante, era una pena menor en un amistoso donde se puede cambiar a medio equipo para retomar fuerzas.

Como era de esperar, el carrusel de cambios desfiguró el encuentro . España, con Navas y Negredo, tuvo más vitalidad, sobre todo al final del choque. Chile continuó con el plan previsto, con mucho derroche y mayor mordiente en todas las líneas, dejando a España en bastante menos de lo que es realmente.

Sin salida de balón

Dicha presión complicó a la campeona. Vidal se puso sobre Javi García y este se hizo menor . No tuvo oficio ni recursos suficientes para hacer fluido el juego. Tapó bien atrás, pero a la hora de sacar el balón no tuvo el suficiente talento ni la visión de juego necesaria, complicando a todo el equipo. En esos pequeños detalles Chile fue algo mejor que su rival, un tanto desdibujada por el buen papel de los americanos.

España se estaba aburriendo del partido cuando Del Bosque metió a Koke en el campo. Todo cambió . El dinamismo del jugador atlético levantó al equipo español al tiempo que abrumó a Chile, que iba decayendo en el choque paulatinamente.

Con ese plus de vitalidad, España se dispuso a morir en el campo contrario, intentándolo hasta el final, empujando con todo y, al menos, dando la cara. Eso le salvó el maquillaje porque en el último minuto otro centro de Pedro lo envió a la red Navas haciendo que España maquillase su juego , un tanto simple y previsible durante muchos minutos . Es posible que ya haga falta savia nueva.