Jesús Torres y Javier Perianes, premios Nacionales de Música 2012

El jurado ha concedido esta distinción al compositor Jesús Torres por “su fructífera trayectoria artística en la que destaca de manera especial su último trabajo de 2011 Apocalipsis ”; junto a “sus valores humanos y la persistencia en una propuesta estética independiente”.

Jesús Torres (Zaragoza, 1965) mostraba su satisfacción al conocer la noticia, "porque es algo que te anima a seguir adelante", sobre todo en momentos como este para una persona que vive únicamente de la composición. Agradece sobre todo una de las valoraciones del jurado, que subraya su carácter "independiente". "Que no te puedan colocar en una escuela es algo que resulta muy atractivo para un compositor, y yo me considero un músico independiente", asegura a ABC en conversación telefónica. También ha señalado la feliz coincidencia de este premio con los 20 años de su debut "oficial"como compositor "que fue precisamente con otro premio, de la SGAE", recuerda Torres.

El jurado también ha destaco su última obra, "Apocalipsis", un encargo de la Semana Religiosa de Cuenca con motivo de su 50 aniversario , estrenado en dicha ciudad, y posteriormente presentada en el Auditorio Nacional, con la que Torres "culmina" un periodo de creación que comenzó a consolidarse en 2005, "con mi sinfonía", a la que se fueron añadiendo posteriormente obras como "Fausto", en la que ponía música a la película de Muranu, la obra "Evocación", sobre textos de Miguel Hernández, o el Concierto para violín y Orquesta, que estrenaron hace unos meses la OSRTVE y su concertino Miguel Borrego.

Con la cartera llena de proyectos, como el estreno de una obra para "Orquesta y percusión", que estrenará Juanjo Guillém, o la obra "Llama", que estrenará el Trío Arbós en la Bienal de Venecia, confiesa que el dinero del premio le vendrá muy bien para meterse "en serio" con la ópera que está componiendo, que llevará por título "Medea", y que contará con libreto del dramaturgo Fermín Cabal, encargado de actualizar el clásico de Eurípides.

Por su parte, Javier Perianes ha sido premiado por “su versatilidad a la hora de escoger un amplio repertorio y el compromiso con la difusión de la música española. Por su proyección internacional con presencia en los más importantes festivales y salas de conciertos del mundo, junto a orquestas y directores de gran prestigio”. Asimismo, el jurado ha destacado “sus valores humanos que hacen de él un modelo para la joven generación de intérpretes españoles”.

El pianista de Huelva aseguraba a este periódico recibir este premio con naturalidad y también con "mucho sueño", pues ayer ofreció un concierto en Marsella, que le obligó a acostarse a las dos de la madrugada, "y esta mañana me he levantado a las cinco para volver a España". Por eso, la llamada del secretario de Estado de Cultura, José María Lassalle , le sonó, al principio un poco a broma, confiesa entre risas Perianes, "aunque reconocí su voz", que dedica el galardón a todos aquellos aquellos que le han ayudado en su carrera: "mi esposa, mi familia, mis profesores". Y también a aquellos que ya no están, un recuerdo que apaga un poco el tono de sus voz a través del teléfono.

Para Perianes este galardón culmina un año extraordinario y "apasionante". "Aunque todavía me queda el próximo mes el debut en los Campos Eliseos", puntualiza. Un año en el que se ha presentado en el prestigioso Festival de Lucerna, se ha convertido en artista residente del Teatro de la Maestranza y ha sido candidado al Grammy Latino por su grabación de "Las noches en los jardines de España" (Harmonia Mundi), junto a la Sinfónica de la BBC, bajo la batuta de Josep Pons. "Yo ni siquiera sabía que existían esos premios", reconoce entre bromas.

En su ajetreada agenda, a su debut en París se añaden sus presentaciones en San Petersburgo, o la actuación, junto a la Filarmónica de Londres en el Albert Hall de la capital inglesa a principios de 2013.