Los secretos de estilo de la nueva Reina

Este tratado de moda y estilo, centrado en la figura de la Reina Letizia, está escrito por una de las grandes expertas del sector en nuestro país, María Luisa Funes, que cuenta con una dilatada experiencia como directiva internacional en los tres grupos clave de la moda mundial: Louis Vuitton, Gucci y Prada. Economista y escritora, la autora describe de manera entretenida el guardarropa completo de la Reina, sus piezas favoritas, aquellos toques que más le favorecen y sus grandes aciertos. También se identifican con profesionalidad los errores de vestuario más llamativos, en un análisis respetuoso y honesto que no se deja llevar por la complacencia.

Además, se desmenuzan las claves para encontrar nuestro estilo propio y acertar en distintas circunstancias, identificando las piezas clásicas para nuestro fondo de armario. Se presenta una curiosa revisión de la historia de la moda, de los errores de protocolo más habituales al vestir y una brillante selección de citas históricas sobre el vestido.

En estos últimos diez años, Doña Letizia ha cambiado, ha ido perfeccionando sus atuendos; ha aprendido a evitar lo que no le favorece y se ha decantado por prendas que suponen novedades en el vocabulario mayoritario: se ha aficionado a los escotes ilusión, a los ensembles con abrigo, a las «pochettes» y a las «minaudières». «Estilo Letizia» explica cada término y cuándo los suele utilizar la Reina en sus apariciones públicas. Se comenta cómo se ha ido aficionando a llevar trajes sastre de pantalón en los actos de día y cómo los combina con tops o camisas; se revela el gusto de Doña Letizia por los cárdigans o «rebecas» ceñidas y monocolor, que utiliza con faldas, vestidos y pantalones. La autora nos desvela a una mujer que ha encontrado su estilo propio.

La etiqueta del Vaticano ha dado más de un dolor de cabeza a las Casas Reales europeas últimamente. Doña Letizia ha asistido a diversos actos y celebraciones religiosas siguiendo una serie de pautas vigentes desde hace al menos un siglo. «Estilo Letizia» desgrana la historia del protocolo de las Reinas en el Vaticano, así como la norma específica para las Reinas de países católicos, el llamado «Privilège du Blanc». Se revisa el atuendo que Doña Sofía ha elegido en sus visitas, y se analizan los últimos estilismos de la Reina Letizia en Roma, señalando las diferencias entre unas circunstancias y otras y comprobando que no le agradan las mantillas ni los tocados.

El libro comenta los peinados más frecuentes de la Reina, al igual que su evolución durante los años. Señala cuáles son los que más le favorecen, según su fisonomía, sus rasgos y su rango. También se incluyen peinados que no han tenido tanta fortuna, como los cortes de melena francesa, los rizos extremos o el «falso bob» con el que ha acudido a varios cócteles en este último año. Al convertirse en Reina, ha escogido recogidos más sencillos, que le quedan mejor. Su maquillaje siempre ha sido favorecedor.

Doña Letizia ha sido objeto de imitación por parte de algunas de las Reinas, dirigentes y primeras damas de todo el mundo. Está creando un estilo propio, en el que «reinan» el encaje, el escote ilusión, las mangas de tres cuartos o los zapatos de plataforma. Desde Matilde de Bélgica a Kate Middleton, de Michelle Bachelet a Cristina Fernández de Kirchner, pasando por Angélica Rivera –la primera dama mexicana– y miles de españolas y extranjeras más, la fiebre por sus vestidos entallados de encaje, sus pendientes y sus cárdigans no deja de subir. Pero ella también ha prestado atención a ejemplos, como el de la elegantísima Rania de Jordania, reinterpretando sus faldas largas de gala combinadas con austeras camisas blancas, los vestidos drapeados, sus peinados o su maquillaje.

«Estilo Letizia» no deja atrás aquello que puede cambiar un look por completo: los complementos. Describe con todo lujo de detalles los accesorios que se han consagrado con el estilo de la nueva Reina. Nos habla de bolsos tipo clutch o carteras de mano, de las distintas marcas españolas que los elaboran y de sus acabados favoritos. Se revisa el estilo de gafas que la Reina ha utilizado en estos últimos años. Los tocados y sombreros, con los que Doña Letizia poco se prodiga, también los realizan talleres españoles de renombre. Los zapatos más habituales, desde los ya conocidos como «Letizios» a los salones en pitón o las sandalias doradas, han llamado la atención de millones de mujeres alrededor del mundo y son copiados por muchas marcas. Todos los accesorios de la Reina.

Es una tendencia actual entre las Reinas europeas, en un intento por mostrar solidaridad y austeridad. Doña Letizia ha sido una de las primeras en repetir con acierto sus atuendos, aunque los sabe combinar con distintos accesorios y peinados para no aburrir. Lo que ahora parece normal, no lo era en la corte de Luís XIV, ni tampoco en la vida pública de Máxima de Holanda o Kate Middleton hasta hace poco. El vestido fresa de tablas de la visita de los Sarkozy a Madrid, la ya famosa falda recta de estilo pitón o el vestido que llevó a la boda de los Duques de Cambridge.

Como decía Oscar Wilde, «no hay nada tan peligroso como ser demasiado moderno para quedarse rápidamente anticuado». Cuando la prensa británica se ha hecho eco de los vaqueros rotos de la Reina Letizia acudiendo al cine o de los leggings de cuero negro ultra ceñidos en alguna entrega de premios, se han preguntado cómo habrían sentado tales atuendos a los españoles. Según la autora, mantener la discreción y el buen gusto son máximas imprescindibles para quedar bien en cualquier ocasión y la Reina debe evitar seguir a rajatabla los dictados de la moda, que son a menudo producto de una falta de nuevas ideas por parte de las grandes marcas y pueden convertir lo ridículo en tendencia. Se señalan varias ocasiones en las que Doña Letizia ha vestido de manera menos afortunada y la conveniencia de adaptar su estilo a su edad, físico, rango y circunstancias, teniendo en cuenta que ser Reina de España es un rango las 24 horas del día.

Las celebraciones y actos militares siguen un protocolo muy preciso. El sistema de signos que forman los uniformes, las indicaciones de rango y las condecoraciones es complicado para cualquier neófito. En los actos de gala, los civiles deben utilizar el chaqué; la Reina Letizia acudía a las galas militares hace años con enormes vestidos largos poco favorecedores, heredando un look de «menina extra-large». Con el tiempo, fue adaptando su atuendo a siluetas más sencillas y acordes con su talla, combinando favorecedoras faldas largas con chaquetas ceñidas. En otras ocasiones, como la entrega de despachos, a las señoras se les exige media gala, pero Doña Letizia suele asistir con pantalones de sport. Esposa del militar de más rango– debería utilizar al menos un traje sastre con falda.

Los amantes de las joyas y los interesados en detalles históricos curiosos se deleitarán con el capítulo dedicado al joyero Real, en el que María Luisa Funes se detiene a describir con minuciosidad el diseño de muchas de las joyas reales, así como su historia. Se explica el motivo por el que aterrizaron en la «trousse» Real diademas, collares, brazaletes, pendientes, anillos, broches y condecoraciones, además de la joyería de la que provienen, dando cuenta de cuáles le han sido regaladas en concreto a Doña Letizia y por quién, cuáles ha llevado hasta ahora y cuáles se espera que comience a utilizar como Reina de España. Se hace un repaso por sus joyas preferidas y un inventario de las más importantes piezas de la Familia Real, las que tienen probabilidad de engrosar el elenco de «joyas de pasar».