Las FARC matan a once militares junto a la frontera con Venezuela

El saldo del asalto fue de un suboficial y diez soldados muertos, así como otros dos soldados heridos, según fuentes militares, que atribuyeron los asesinatos a la principal guerrilla del país. Se trata de uno de los ataques más terribles de la guerrilla en los últimos meses. El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, y la cúpula militar se trasladaron ayer hasta Arauca para conocer sobre el terreno la situación de la seguridad.

El Gobierno se ha visto obligado a aumentar el patrullaje en zonas donde en los últimos años ha dado un impulso a su industria petrolera y minera, que se han convertido a su vez en objetivo de los terroristas. Precisamente el departamento de Arauca, en el noreste de Colombia y colindante con el estado venezolano de Apure, posee grandes reservas petroleras.

Los intentos de acercamiento al Gobierno por parte de una guerrilla que ha sufrido la continua muerte de sus cabecillas en los últimos años han coincidido con exhibiciones de su poderío militar. A finales de febrero, la narcoguerrilla anunció el fin de los secuestros extorsivos, pero el Gobierno de Santos se niega a emprender negociaciones de paz mientras no liberen a todos sus rehenes, dejen de matar y entreguen las armas.

En una ostentación de su cinismo, la guerrilla colombiana había aceptado unas horas antes de este último ataque mortífero el protocolo de seguridad para la liberación de diez policías y militares en su poder. Aunque la condicionó a que el Ejecutivo de Santos permita que activistas de Mujeres del Mundo por la Paz, coordinados por la exsenadora Piedad Córdoba, visiten a rebeldes presos.

Mientras la guerrilla no ha fijado una fecha para la puesta en libertad de los militares, que pretenden realizar en dos etapas, la controvertida exsenadora adelantó que el próximo 3 de abril es la fecha límite para que los últimos «prisioneros de guerra» de las FARC regresen a sus casas después de más de una década de cautiverio. La Casa de Nariño, sede del Ejecutivo, no se ha pronunciado sobre las nuevas condiciones impuestas, aunque Santos ha reiterado que rechazará cualquier condición previa.