La vicepresidenta del Gobierno, Elena Salgado , tiene previsto tomarse dos años «cuasisabáticos» en los que estudiará Historia Contemporánea y colaborará con una organización no gubernamental (ONG) «fuera de los focos» cuando cese en sus tareas como ministra de Economía y Hacienda.
«Me ... tomaré dos años cuasisabáticos mientras tenga incompatibilidad, pero estaré muy activa», asegura Salgado en una entrevista que publica mañana la revista Vanity Fair en su número de octubre.
Según la ley de conflictos de intereses de 2006, en los dos años posteriores a dejar el Gobierno no se pueden asumir en la empresa privada labores relacionadas con competencias del cargo público desempeñado.
Por otro lado, la vicepresidenta rechaza la «diligencia» de los recortes de la presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal , sobre quien afirma que lo único que ha visto es a «una persona que se ha pasado dos meses diciendo que encontraba facturas en el cajón del gobierno anterior».
Salgado admite además que la decisión de la que más se arrepiente como integrante del Gobierno es de no haber tenido un superávit mayor en algunos años, «la famosa hucha de Pedro Solbes» (su antecesor), recalca.
La vicepresidenta recuerda que le faltará tiempo para ver la recuperación económica de España, pero al ser preguntada por si asistirá «desde la barrera», matiza que la verá «desde dentro».
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