Arabia Saudí intenta ahogar una creciente revuelta chií
Más de 10.000 soldados han sido enviados al este del país, donde reside esa minoría
DANIEL IRIARTE
Más de una veintena de chiíes han sido detenidos en Arabia Saudí por manifestarse contra la discriminación que sufre esta minoría religiosa. Las protestas han estado teniendo lugar a lo largo de las últimas dos semanas en Qatif, Awamiya y Hofuf, en el este del ... país. De acuerdo con el activista de derechos humanos Ibrahim Al Mugaitib, veintidós personas fueron arrestadas el jueves, junto a otras cuatro el viernes, de modo que el total de detenidos asciende a veintiséis, todos en Qatif.
El Gobierno de Arabia Saudí —una Monarquía absoluta— ha reaccionado prohibiendo toda muestra pública de descontento. «Las fuerzas de seguridad utilizarán todo tipo de medidas para prevenir cualquier tentativa de alterar el orden público», anunció el Ministerio del Interior en un comunicado difundido por la televisión estatal, que aseguró que «las protestas violan la ley islámica y las tradiciones del Reino».
El Consejo Superior de Clérigos, bajo control gubernamental, ha manifestado también su apoyo a la medida: «La reforma y la crítica no debería hacerse a través de manifestaciones y métodos que pueden provocar conflictos y divisiones. Es lo que los eruditos religiosos de este país han prohibido y advertido, tanto ahora como en el pasado», han declarado.
El Ejército, en alerta
Ayer se hizo público que se ha puesto en estado de alerta al Ejército saudí en las regiones de mayoría chií, en previsión de posibles revueltas. Según algunos informes, unos diez mil soldados y miembros de las fuerzas de seguridad están siendo enviados a la región por carretera. Las regiones chiíes del este son algunas de las más ricas en petróleo de todo el país.
En las últimas protestas, los manifestantes exigían la liberación de presos encarcelados sin juicio, así como el fin de la discriminación laboral y salarial. El Gobierno saudí niega que dicha discriminación exista. La semana pasada, el Rey Abdulá regresó a Riad después de una ausencia de tres meses debido a razones médicas. Inmediatamente anunció subvenciones públicas por valor de 37.000 millones de dólares (unos 26.000 millones de euros), en un gesto que ha sido ampliamente interpretado como un intento de acallar el descontento en el reino.
Más de diecisiete mil personas han apoyado un llamamiento en la red social Facebook para orquestar dos manifestaciones en Arabia Saudí durante este mes. Una coalición opositora, formada por liberales, chiíes e islamistas moderados, ha pedido al Rey Abdalá que permita elecciones en el país.
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